Colombia-Inglaterra y Suecia-Suiza dirimen los dos últimos duelos de octavos de final del Mundial para buscar las dos últimas clasificadas para cuartos, en un duelo que jugarán el sábado. Inglaterra se siente ante una oportunidad histórica. Puede que también Colombia. Competir por el lado bueno del cuadro del Mundial ha alimentado los sueños de ambas selecciones, que se enfrentan hoy a las 20.00 horas.

Gary Southgate, técnico inglés, habló de forma particularmente elocuente de ello en la rueda de prensa previa. «Han transcurrido 10 años desde que ganamos una eliminatoria. Este equipo tiene una magnífica oportunidad ahora de ir más allá que otros equipos más experimentados de la historia de Inglaterra».

Southgate se mostró entusiasmado ante el desafío. «Estos son los tipos de partidos en los que quieres participar. Partidos importantes. Tenemos la oportunidad de escribir nuestra propia historia», dijo Southgate, que parece que podrá contar con el centrocampista del Tottenham, Dele Alli, lesionado en el encuentro de estreno. Una alta muy relevante.

Colombia, dirigida por el argentino José Pékerman, tuvo un inicio de torneo para olvidar al caer a manos de Japón (1-2). Pero enseguida encauzó el rumbo con triunfos contra Polonia (3-0) y Senegal (1-0) y llegó a octavos como primero del Grupo H. Ahora la duda se centra en James.

El futbolista del Bayern de Múnich se marchó tocado del encuentro ante Senegal y el pasado sábado por la noche la Federación Colombiana (FCF) informaba que sufría un «edema menor sin ruptura fibrilar en el sóleo derecho». No es una rotura fibrilar en el sóleo, como inicialmente se pensaba, lo que le habría dejado sin Mundial, pero es duda ante Inglaterra.

«Venimos jugando partidos duros y decisivos y eso también nos levantó mucho la autoestima. Creemos en nuestro equipo. Estamos para hacer un buen partido», dijo.

En el otro duelo, Suecia y Suiza compondrán desde las 16.00 horas el trabalenguas del Mundial. Suecos y suizos entrelazados, enredados. Dos rivales que coinciden en la condición de revelación después de haberse clasificado en la repesca. La solidez exhibida por dos bloques sin grandes estrellas pero sí con las ideas claras sobre lo qué es el fútbol como juego de equipo promete un duelo interesantísimo en estos octavos de final.

Suecia no disputaba la posibilidad de superar la ronda desde 1994, en Estados Unidos. Suiza, desde el Mundial de 1954, del que fue anfitriona. Es la primera ocasión en que ambas selecciones se enfrentan en un gran torneo internacional. La defensa volverá a ser clave. Suiza tratará de variar el guión y será interesante ver si Lang y Djourou son capaces de sustituir a los sancionados Schar y Lichtsteiner.