Comienza la gran afluencia de visitantes a la montaña. Desde ahora los valles pirenaicos y las serranías zaragozanas y turolenses se llenarán de familias, turistas, senderistas y montañeros. Muchos de ellos acceden sin la preparación idónea. Los números cantan. El 80% de los accidentes de montaña en Aragón se producen por personas de fuera de nuestra comunidad. Gracias a la iniciativa de la territorial de la mano con Prames se creó hace 15 años la campaña Montañas para Vivirlas Seguras. El objetivo era concienciar a los amantes de la montaña para que fueran bien preparados en sus excursiones. El esfuerzo fundamental se basaba en las encuestas de los voluntarios a los senderistas en los valles y en los picos.

Hace tres años la campaña cambió de cara y de nombre. Se pasó a denominar Montañas Seguras y se dejaron de hacer encuestas. De un esfuerzo total en el verano, se pasó a realizar una labor continuada a lo largo del año. La semana pasada se firmó el convenio institucional de la decimoquinta edición. Se han incorporado al acuerdo dos entidades. Son Aramón y el Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia. Continuan un año más la Federación Aragonesa de Montañismo, el Departamento de Política Territorial e Interior y la Obra Social de Ibercaja. El presupuesto ha crecido y ahora alcanza los 116.634,41 euros.

Marta Ferrer es la directora de la campaña. Esta técnica reconoce que en 15 años ha cambiado mucho la concienciación de la gente que visita la montaña. "Nunca en la prensa se escribió tanto sobre el tema. La campaña tiene el objetivo de educar y enseñar a la gente sobre que tiene que hacer y las decisiones que ha de tomar en la montaña. En 15 años ha crecido el número de gente que va a la montaña y aumenta de forma discreta el número de rescates. Lo mas importante es que se habla de seguridad en montaña. Hay 600 informadores en 300 puntos informativos que quieren que las personas con las que hablan vuelvan sanas y salvas a casa", reconoce Ferrer.

Los pilares

La campaña se sustenta en tres pilares. El primero son la red de informadores voluntarios, el segundo la acciones con los niños en campamentos y la tercera internet y las redes sociales. La red de informadores voluntarios esta compuesta por 300 puntos informativos en albergues, hoteles, refugios, oficinas de turismo, centros de interpretación... "Este año el objetivo no es que crezca la red. Queremos trabajar en profundidad con ellos e implicarles más. Es el tercer año y queremos lanzar un planteamiento consensuado. Que seamos incisivos y se hable de seguridad en montaña, no de manera negativa por los accidentes, sino por el disfrute en la naturaleza", afirma Ferrer. Los informadores se ayudan de unos mapas de Pirineo y del Moncayo a los que este año se han añadido los del Reino de los Mallos y la Sierra de Albarracín.

La segunda acción de la campaña se acomete con los campamentos. "Un total de 160 acampadas han pedido asesoramiento. Esta previsto visitar 12 campamentos. Intentamos hacer actividad con los chavales y labor formativa con los monitores. Hay que ir antes de que hagan la actividad en la montaña. Se hace en colaboración con el Instituto Aragonés de la Juventud", dice.

El tercer pilar es internet y las redes sociales. "Vamos a remodelar el portal para hacerlo mas dinámico, trabajar con entradas tipo blog, que es lo que se necesita. La novedad de la página montanasegura.com es un juego para equipar al montañero", apunta. Una de las grandes novedades es la puesta en escena de la aplicación ALPIFY, un sistema de geolocalización en el medio natural que facilitará las labores de rescate. Con ello se conocerá la ubicación GPS del usuario cuando llame al 112. "Los grupos de rescate se ahorrarán mucho tiempo porque sabrán a que punto exacto deben de dirigir el helicóptero", explica Ferrer.