El Club Hielo Jaca quiere hacer pleno. Se jugará la Liga con su eterno rival, el Txuri Urdin. Podrían ser tres títulos de tres intentos seguidos y la decimocuarta Liga. Los dos primeros encuentros se disputan en San Sebastián este fin de semana. «Los dos equipos tenemos las mismas posibilidades. Lo veo como el año pasado», reconoce Baldris, el técnico del equipo altoaragonés. Para Baldris la clave será «jugar bien defensivamente y aprovechar nuestras ocasiones de gol. Nosotros jugamos con tres o cuatro líneas al tener más gente que el Txuri».

Baldris tiene un libro de estilo muy claro. «Me gustan los equipos rápidos, que patinen y que creen jugadas. Mis jugadores tienen que presionar, ser agresivos y estar encima del otro equipo. Son conjuntos que provocan y que hacen que el rival cometa errores», reconoce.

El origen

Muchos piensan que Baldris es jacetano de pura cepa. Pero el técnico altoaragonés nació en Montreal hace 49 años. Es un ciudadano del mundo del que se podría escribir casi un best seller. Sus padres emigraron a Canadá, aunque ahora viven en Calpe. «Se conocieron allí. Tengo otros tres hermanos. Roberto juega al hockey profesional en Francia, mientras que Gerardo trabaja en Tailandia y Mari, que es la mayor, está en Abu Dabi», explica.

Baldris lleva toda la vida vinculado al hockey. «Fui profesional hasta los 20 años en Canadá. Me ficharon los Búfalos Sabres. Estuve tres años, pero no pude formar parte de la primera plantilla. Entonces decidí fichar en el año 88 por el Jaca con 25 años». Entre medias jugó dos años en el Barcelona, cinco temporadas en el Angers y otro en el Anglet. Acostumbrado a la vida canadiense, le chocó mucho el estilo de vida de España. «Venía de una ciudad grande donde se vive en las afueras y llegaba a Jaca, un sitio pequeño donde se conoce todo el mundo y se vive una vida de barrio. Entonces había mucha diferencia en el nivel de vida. Ahora nos hemos hecho más norteamericanos», afirma.

Baldris lo ha sido todo en el hockey nacional. «Al venir de fuera era uno de los jugadores más destacados. Jugué con España 15 años y fui capitán, doce. También fui el seleccionador. Mi mejor época fue cuando jugué en la Liga francesa en la Primera categoría con el Angers». Algunos lo definen como el mejor defensa de la historia en España. «Siempre jugué en la defensa. Era muy ofensivo y subía mucho. Era un carrilero al estilo de Dani Alves». Militó durante 12 temporadas en el Club Hielo Jaca. «Recuerdo que me retiré a los 38 años y volví en una segunda etapa hasta los 42. Lo dejé definitivamente en una Copa Continental». Como no puede ser de otra manera, admira a la selección canadiense. «Allí se hace un hockey muy físico. Pero hay tanta gente, que hay jugadores técnicamente muy buenos. Cuando lleva a los 22 mejores jugadores ganan casi siempre».

Ahora todos lo consideran como un jacetano más. Está separado y sus hijos viven muy lejos de la ciudad altoaragonesa. Bruno juega al hockey en el Angers y Yaiza estudia en Barcelona. Trabaja en el manteniento del túnel de Somport y está enamorado de Jaca. «Sobre todo me gusta el sol. Cuando abro la persiana y hay sol, doy un bote. El sol y el cielo son estupendos en este lugar», reconoce el jacetano.