El playoff vuelve a escena. A pesar de que el Zaragoza cuenta con apenas dos puntos de renta sobre los puestos de descenso a Segunda B, una sola victoria -la conseguida en la última jornada del 2018 ante el Extremadura- y, sobre todo, la llegada de Víctor Fernández, han devuelto al optimismo al zaragocismo, que se atreve, incluso, a volver a hablar de promoción y de ascenso, cuando le separan 13 puntos del sexto clasificado. Si el propio presidente, Christian Lapetra, ya pidió al 2019 volver a pelear por subir a Primera, ayer fue uno de los futbolistas, James Igbekeme, el que, sin tapujos, volvió a mirar hacia arriba. «Vamos a ser el mejor equipo de la segunda vuelta y no descarto llegar al playoff. Vamos a jugar bien y vamos a pelear porque podemos hacerlo», aseguró el nigeriano.

Para semejante afirmación, James, un jugador clave para Víctor Fernández, se apoya en el profundo cambio de sensaciones transmitidas por el equipo desde la llegada del técnico zaragozano. «Nos fuimos de vacaciones con una sensación muy positiva porque el año terminó con una victoria que nos hace ser optimistas de cara a los próximos partidos y para lo que resta de temporada», apuntó el centrocampista, que considera «factible» lograr el triunfo mañana ante el Sporting. «Ganar sería clave para los próximos partidos. Estamos entrenando fuerte para ello», añadió.

VÍCTOR, CLAVE

Porque para James, la figura de Víctor Fernández ha aportado muchas cosas al equipo. «Cree mucho en nosotros. Es un muy buen entrenador y tiene mucha sensibilidad para conocer a los jugadores y detectar sus fortalezas. Todos queremos jugar, tener el balón, hay más entusiasmo y en todas las líneas estamos más comprometidos con la posesión y eso se nota mucho. La sensación es muy buena y eso me hace estar convencido de que este año será diferente», insistió.

Personalmente, James completó ante el Extremadura uno de sus mejores partidos como zaragocista. Lo hizo desde el doble pivote, junto a Javi Ros, dando comienzo a la jugada del empate de Pombo y completando una notable actuación. «Me desanimé un poco con la lesión después de haber empezado jugando y con sensaciones muy positivas, pero ante el Extremadura me sentí muy a gusto y acabé con buenas sensaciones. Me siento bien», afirmó el medio, que, en todo caso, no cerró la puerta a una futura salida del equipo. «Aprecio mucho el apoyo de la afición y puedo imaginar crecer aquí como futbolista, pero si llega una oferta y si el club decidiera dejarme marchar, podría ser beneficioso para todas las partes», aunque matizó que «estoy muy a gusto aquí».

Porque James, de 23 años, considera Zaragoza «una buena ciudad y un buen sitio para vivir» y su adaptación discurre por el mejor camino. «Me estoy adaptando muy bien a ella, y, además, Zaragoza está muy bien situada para visitar otros lugares y ciudades cercanas», incidió.

Y eso que Igbekeme reconoce su sorpresa ante la trascendencia que el fútbol adquiere en España y, sobre todo, en Zaragoza. «Ha sido una sorpresa para mí. Cuando jugaba en Portugal no existía la presión ni las ruedas de prensa ni tanta noticias. Aun así es una experiencia positiva y me hará más fuerte convivir con ese entorno», subrayó el nigeriano, que volverá a ser titular mañana.