El colombiano James Rodríguez regresó dos años después a los entrenamientos con el Real Madrid tras su cesión al Bayern Múnich, que tenía una opción de compra sobre el jugador pero no la ha ejercido, a petición del propio jugador cafetero.

James no se entrenaba con el equipo blanco desde el 2 de junio del 2017, un día antes de la final de la Champions League de Cardiff, en la que el Real Madrid obtuvo su duodécimo título al vencer por 4-1 a la Juventus.

El Real Madrid se sometió ayer a un entrenamiento a puerta cerrada antes de viajar a Múnich para enfrentarse hoy a las 18.00 horas al Tottenham inglés en la Audi Cup, después de la gira por Canadá y Estados Unidos que concluyó el viernes con una severa derrota (7-3) frente al Atlético de Madrid.

De todos modos, a pesar de que volvió a ejercitarse con el Real Madrid, el colombiano no viajó ayer a Múnich con el resto de la expedición, lo mismo que Courtois, Bale, Mendy, Brahim Díaz y Luka Jovic.

El portero belga sufre un esguince de grado II en el tobillo izquierdo y su presencia en el primer encuentro de Liga, previsto para el 17 de agosto contra el Celta de Vigo, es dudosa. Courtois estará de baja cerca de tres semanas y su dolencia agranda la relación de lesionados de la plantilla.

Además de la de Marco Asensio, que puede perderse toda la temporada a causa de una rotura del ligamento cruzado y el menisco producido en el encuentro contra el Arsenal, la enfermería blanca aún cuenta con Brahim y el francés Mendy.

Jovic continúa con sus problemas del tobillo, mientras que Bale, que no termina de resolver su futuro, no entrenó ayer tampoco con el resto de la plantilla. El técnico francés dejó fuera de la citación al futbolista galés, que a última hora rechazó ir al fútbol chino y que está pendiente de aclarar su situación en el club, ya que el atacante sigue en la rampa de salida.