--Ya está en el Zaragoza. ¿Cómo afronta este nueva etapa?--Como si hubiera pasado página y empezara un libro nuevo. Creo que es el momento de encontrarme a mí mismo, después de unos años que quiero olvidar cuanto antes. Ahora, sólo miro hacia delante y quiero corresponder a un club que ha confiado en mi fútbol.

--Sus palabras suenan a reivindicación.--Es posible, pero más que demostrar cosas a alguien, me las tengo que demostrar a mí mismo, volver a sentirme bien. Lo que quiero es estar a gusto, feliz en el Zaragoza y si eso sucede estoy seguro que podré ofrecer lo máximo.

--Lo hizo ya en el Alavés, pero después su estrella en el Milan, en el Atlético de Madrid y hasta en el Bolton se ha ido apagando. ¿Encuentra la explicación?--Se han dado muchas circunstancias, cosas que conforme te vas haciendo mayor ves con más perspectiva y sabes en qué has cometido errores. A mí no me ha ayudado mucho mi carácter, mi forma de ser, ya que soy una persona muy abierta y a veces puede parecer que me tomo mucho las cosas a cachondeo y no es así. Pero tampoco quiero pensar demasiado en el pasado, que lo hagan otros.

--Después de tanto tiempo sin continuidad en un equipo, ¿entiende que la afición tenga dudas sobre lo que puede aportar?--Claro que asumo que la gente lo pueda pensar. Cualquier futbolista que llega nuevo genera siempre un punto de desconfianza en si cumplirá las expectativas, pero mucho más si no ha jugado demasiado. Sin embargo, la respuesta a eso se irá viendo durante la temporada. Yo, desde luego, vengo con la intención de ofrecer lo máximo.

--Víctor tiene plena confianza en sus posibilidades.--Eso es de agradecer y ya ha sido un aval muy importante para venir aquí, pero lo que tengo que hacer es corresponder a esa confianza con el trabajo para hacerme un puesto en el equipo titular.

--No lo va a tener fácil para lograrlo. Villa se salió en su primera temporada en el Zaragoza.--Creo que podemos ser compatibles y jugar juntos, pero es evidente que la competencia será dura. En Primera nadie te regala nada y Villa ya demostró el año pasado de lo que es capaz, es muy rápido y hace goles con facilidad, y también está ahí Goran Drulic. Habrá que trabajar muy fuerte, eso está claro.

--Además, usted tiene el hándicap de haberse incorporado más tarde al trabajo de pretemporada.--Ahora me queda por delante un trabajo de adaptación a mis nuevos compañeros que siempre cuesta, pero me encuentro bien físicamente. Tendría más dificultades si no me hubiera entrenado, pero llevo haciéndolo con el Atlético desde el 28 de junio. Espero no tener problemas y aún quedan amistosos para eso y para coger ritmo, algo que se echa en falta cuando llevas un tiempo sin jugar con continuidad.

--¿Dónde sitúa el listón del Zaragoza en la próxima temporada?--Hay un buen equipo, joven y competitivo, aunque todos los rivales se han reforzado y no va a ser fácil. De todas formas, creo que tenemos condiciones para estar entre los diez primeros de la Liga, muy cerca de los puestos de UEFA, y llegar lo más lejos posible en esa competición y en la Copa. Siempre soy muy ambicioso y tengo claro que hay que mirar hacia arriba, ponerse el listón lo más alto posible.

--En su mejor temporada en el Alavés hizo 22 goles. ¿Promete repetirlo?--Ojalá, incluso mejorarlo. Pero a mí no me gusta prometer cifras, porque después no tienes la suerte de cara y te la tienes que comer. Cuantos más haga, mejor.