Aragón ha vuelto a hacer historia en el alpinismo y esta vez ha dado un giro de tuerca. El zaragozano Javier Camacho alcanzó ayer la cima del Everest, el techo de la tierra con sus 8.848 metros sin la ayuda de oxígeno. Es el primer aragonés que lo logra así y el cuarto que holla la cima nepalí. Los primeros en alcanzarlo fueron Pepe Garcés y Toño Ubieto el 6 de octubre de 1991 en una expedición conjunta de Peña Guara y Montañeros de Aragón. Fue por la vertiente nepalí.

Pasaron 22 años hasta que Carlos Pauner terminó su reto de los 14 ochomiles. Fue un 22 de mayo del 2013 en una aventura con su amigo Raúl Martínez. Ahora ha tocado la gloria Camacho después de haberlo intentado hace dos años. Pero fue sorprendido por un terrible terremoto. El alpinista y fotógrafo Javier Camacho ascendió ayer por la vertiente nepalí. Así lo reflejó el propio protagonista en la página web en la que ha relatado paso a paso su nueva y extrema aventura. Camacho, miembro de la Asociación Española de Fotógrafos de Naturaleza (AEFONA) y del Club Montañeros de Aragón, especializado en paisajes naturales y con más de 70 premios y menciones obtenidas en concursos nacionales e internacionales, llegó a Nepal el pasado 15 de abril y tenía previsto atacar la cumbre entre el 10 y el 28 de mayo. Finalmente lo ha consiguió después de aprovechar una ventana de buen tiempo tras haber alcanzado los 7.024 metros bajo severas condiciones en forma de ventiscas y un considerable cansancio físico.

La marca Olympus ha patrocinado con 30.000 euros a Camacho para afrontar el reto de conquistar el techo del planeta. La calidad de las fotografías de este alpinista, nacido en Zaragoza en 1971 pero residente en Pamplona, sedujo a la compañía japonesa para probar su último modelo Olympus en la cima del Everest.

El alpinista cuenta con expediciones a diversas cadenas montañosas, el Himalaya, Karakorum, Andes, Urales, Ártico, África o viajes por más de 40 países, consiguiendo ascender cuatro de las siete cumbres más altas de los continentes. Camacho ha realizado 6 expediciones a montañas de 8.000 metros, ascendiendo el Lhotse el año pasado y el Cho Oyu, de 8.516 y 8.201 metros, cuarta y sexta cumbres más altas de la tierra sin uso de oxígeno artificial, a la que ahora hay que añadir la hazaña del Everest.