La pintura del Tecnyconta Zaragoza ya cuenta con todos sus integrantes. El martes Javier Justiz aterrizó en la capital del Ebro y se dio un paseo por el Príncipe Felipe para conocer la que será su nueva casa las dos próximas temporadas. Ayer el cubano se unió a los entrenamientos para preparar la pretemporada del equipo con todos sus nuevos compañeros y el cuerpo técnico, a excepción del base americano Bo McCalebb, cuya llegada está programada para finales de esta semana.

El inicio de toda nueva etapa conlleva dificultades, y más despúes de un cambio de grandes dimensiones como ha sido el caso de Justiz. Un país diferente, una Liga mucho más exigente, «la segunda mejor del mundo, después de la NBA», según destacó el pívot, y el desafío que ello acarrea. El jugador está acostumbrándose al notable cambio de hora respecto a Sudamérica y comienza a aclimatarse a Zaragoza, pero quiere adaptarse lo más rápido posible para «progresar en mi juego y cumplir con las expectativas que el cuerpo técnico y la directiva tienen puestas en mí».

Su currículum en Argentina no deja indiferente a nadie. La pasada temporada se proclamó campeón de la Liga de las Américas con el San Lorenzo de Almagro. Además, sus buenas actuaciones en la competición liguera, con especial hincapié en labores defensivas, le permitieron colarse entre los nombres del mejor quinteto de la pasada campaña.

buen reboteador / Sus virtudes sobre la pintura son, precisamente, los motivos por los que el Tecnyconta Zaragoza le eligió como compañero de Fran Vázquez en la demarcación del ‘5’. Asimismo, el propio jugador destacó ayer en su primera comparecencia ante los medios que su potencial reside en la defensa. Se define como «un pívot puro» capaz de «luchar por el rebote», su principal punto fuerte. Además gracias a su envergadura, mide 2’10, puede «anotar puntos bajo el aro», recalcó.

Su llegada a la capital del Ebro es «un sueño hecho realidad». Hace pocos años que el baloncesto es considerado como deporte profesional en Cuba y, hasta ahora, no había jugadores de este país en las principales Ligas del mundo. Con su fichaje por el club aragonés, Javier Justiz ya ha hecho historia al convertirse en el primer cubano de la Liga Endesa.

Aterriza en Zaragoza con 26 años y se enfrenta al reto de triunfar en Europa. Es novato en la competición española, pero ya sabe lo que es enfrentarse al Real Madrid y al Barcelona en partidos amistosos y conoce la «dureza» de la máxima categoría del baloncesto nacional, por lo que «he de prepararme mentalmente para darlo todo sobre la cancha», aseguró.

No estará sólo en ese cometido. La veteranía de muchos jugadores de la plantilla será un plus para el desarrollo de los más jóvenes del plantel a lo largo de la temporada. Además, Porfirio Fisac es un entrenador de sobrada experiencia en los banquillos de la ACB. El técnico aprovechó el primer día de Justiz en la entidad rojilla para explicarle los deberes de esta semana. «Me ha pedido que tenga la cabeza dura, que no me conforme nunca y que trate de luchar por un puesto en el equipo a la par que crezco como jugador», recalcó el pívot.

Ayer fue la primera toma de contacto entre el recién llegado y sus nuevos compañeros. Aún no ha podido conversar con la mayoría del vestuario, pero sí que ha recibido instrucciones de Fran Vázquez, su colega en la pintura. Para Justiz este es el momento de «trabajar mucho para que el club se sienta cómodo conmigo y viceversa», agregó.

Apenas lleva 48 horas en la ciudad y el nuevo ‘5’ tiene el reto de «hacer crecer» al equipo. Para ello, destacó, hay que «luchar en cada partido para quedar lo mejor posible en la clasificación y que el público disfrute con nosotros, e, incluso, intentar ganar la Liga». Aún no ha comenzado la campaña aunque el optimismo del jugador cubano está en su punto más álgido.