El pívot del CAI Zaragoza no ha podido olvidar aún el cruel final que tuvo el partido de la primera vuelta frente al Herbalife Gran Canaria. Jones está convencido de que pueden devolver el golpe y de paso seguir creciendo para luchar por cotas mayores. El cinco rojillo fue testigo en primera línea, tras cambiar el bloqueo, de la canasta de Oliver: "Lo recuerdo muy bien, me ha perseguido durante mucho tiempo. Fue una derrota dura porque jugamos un choque muy intenso y caímos con ese último tiro sobre mí. Ahora miramos hacia arriba, queremos vencer sobre todo los encuentros de casa".