Maite Gargallo ha cumplido el sueño de su vida y será nueva atleta olímpica. La marchadora del Scorpio se enteró de la noticia en la mañana de ayer por una llamada telefónica que realizó a su domicilio Josep Marín, responsable nacional del sector. De esta manera, la zaragozana es el primer atleta fijo de Aragón para los Juegos de Atenas.

Gargallo lleva muy poco tiempo en el mundo de la marcha. En su tercer año en la modalidad ha logrado un éxito difícilmente superable; el año pasado fue al Mundial de París, donde se retiró, y este año se ha consolidado como la tercera mejor española de la distancia de los 20 kilómetros junto a María Vasco y Beatriz Pascual, que también marcharán en la capital helena.

"Desde el sábado sabía que podía ser convocada, pero estaba muy igualada con otra atleta, así que he estado muy ilusionada y muy nerviosa", explica Gargallo, que no se esperaba llegar hasta unos Juegos. "Esta temporada lo tenía en mente, pero ha sido una sorpresa. Hasta mi madre me ha dicho: ´¡Quién te iba a decir a tí que ibas a llegar a unos Juegos!´", relata la marchadora, que enseguida comenzará su preparación para Atenas.

"Ahora no estoy en mi mejor momento de forma, ni de lejos, pero con la preparación necesaria, espero llegar a los Juegos en disposición de mejorar mi mejor marca personal (1.30.40)", asegura la aragonesa, que el día 26 comenzará una primera concentración en Benasque de 15 días y, después, estará otras dos semanas en Orihuela del Tremedal. "Si no ocurre nada raro, como en el último Mundial, el equipo español que viaja a los Juegos es muy bueno, para luchar por las medallas", opina Gargallo.

Esta ingeniera agrónoma nacida el 15 de enero de 1969 en Zaragoza destacó en su primera época como fondista. Entrenada siempre por Javier de la Fuente, se retiró del atletismo durante cuatro años y volvió con fuerza a este deporte. Fichó por el Scorpio para ocupar una plaza en el equipo de la Liga y se dio cuenta de que la marcha era su prueba.

Este año comenzó la temporada dirigiendo su preparación hacia Atenas. Pero sufrió un golpe muy duro al ser dascalificada a mitad de prueba en los Campeonatos de España de marcha en ruta disputados en Zaragoza. Su talón de Aquiles es la técnica que le ha jugado malas pasadas.

"Desde el principio sabía que podía luchar por estar en Atenas, pero esos problemas que tuve me han hecho ir a trompicones", dice Gargallo que, sin embargo, ha sabido rehacerse. En la Copa del Mundo de Alemania fue la tercera española y el fin de semana pasado en La Coruña finalizó en 1.31.45, a pocos segundos de Rocío Florido.

En la selección de Marín ha primado la actuación de Gargallo en la Copa del Mundo. "He llevado a Maite por su regularidad. Me he decidido por ella puesto que Eva Pérez abandonó en la Copa del Mundo y Florido no fue a Alemania", afirma el catalán. Marín explica que la zaragozana "lleva poco tiempo en la marcha. Iba muy rígida y su marcha era sui generis, diferente, pero ha ido mejorando. Evoluciona favorablemente y no sé cuál puede ser su techo", sentencia.