Las palabras de lamento fueron la nota predominante entre los componentes de la plantilla tras el encuentro de ayer, en el que el Zaragoza no supo concretar un triunfo que tenía en la mano. El equipo no ha logrado ninguna victoria en los cinco partido que ha disputado, incluido el de la Copa del Rey, y ese aspecto puede empezar a pesar. Dijo Javi Álamo, el capitán, tras salir de vestuario que necesitan ganar "para que el equipo empiece a creer".

Al central Mario, que confesó que le pesaban las piernas, le recordó el partido al del Osasuna. "Ha sido lo mismo que el partido anterior, hay que aprender de los errores y que no sucedan esas cosas", dijo el defensor, que vio a un buen rival. "El Sabadell nos plantó cara, pero nos encontramos con el gol y la expulsión. En la segunda parte no sé qué pasó, pero dimos un paso atrás, se vinieron arriba y consiguieron el empate".

Mario expuso algunas de las causas por las que el Zaragoza no termina de arrancar. "Está claro que somos un equipo nuevo, que hay que acoplarse. No es una excusa, pero es todo nuevo. El equipo parecía cansado, el campo está un poco mal también...", manifestó el zaguero, que asegura que la idea es "ganar y ya está, y brindar los tres puntos a la afición".

Por su parte, Javi Álamo tampoco supo explicar muy bien el resultado final, aunque habló de cansancio. "Fue otra vez como el día del Osasuna, una pena. Nos está costando en la recta final de los partidos. Incluso el Sabadell tenía un jugador menos, pero tuvieron la posesión", manifestó el capitán, que pidió al equipo más concentración en la estrategia. "Nos han creado muchísimo peligro en los córners, hay que estar mejor defensivamente ahí. Nos está costando muchísimo ganar y es una pena porque la gente nos está apoyando muchísimo este año. Nos hace falta una victoria para que el equipo crea, para que se mantengan las ganas y la ilusión", concluyó el atacante.