María José Poves es la mejor atleta aragonesa de la historia. La marchadora zaragozana cuenta con un historial deslumbrante. Olímpica en Pekín y Londres, disputó cuatro Mundiales y ganó cinco Nacionales absolutos. El 2012 fue su mejor temporada. Tenía 34 años y ya demostró encontrarse como una moto imponiéndose en los Campeonatos de España de Pontevedra con marca personal en los 20 kilómetros (1.28.15). Ese mismo curso logró un excelente duodécimo puesto en los Juegos Olímpicos celebrados en Londres.

Entre medias acudió a Saransk, la cuna por aquellos años de la marcha en Rusia, para disputar la Copa del Mundo. En esa ciudad de 300.000 habitantes se habían formado las mejores especialistas rusas. El equipo español compuesto por María Vasco, Beatriz Pascual, María José Poves, Lorena Luaces y Julia Tackacs se enfrentó a Olga Kaniskina, la heroína local y campeona olímpica en Pekín, y Yelena Lashmanova. Por equipos Rusia ganó a España.

Fue tan lejos de Aragón donde la atleta del Simply Scorpio realizó la gran competición de su vida. Terminó la tercera tras Lashmanova, que dio la sorpresa ganando a Kaniskina. «La competición fue perfecta y no me dieron ningún aviso. Hasta el kilómetro siete iba la tercera española. Marchamos a la una y media de la tarde con 30 grados. Fue espectacular la jornada, con miles y miles de aficionados animando», explicaba Poves tras su gran gesta.

Han pasado seis años desde entonces. Poves tiene ahora 40 y el pasado fin de semana fue uno de los centros de atención en los Nacionales de Getafe. De manos de Raúl Chapado, el presidente de la Federación Española de Atletismo, recibió la medalla de plata de la Copa del Mundo tras la descalificación de la rusa Olga Kaniskina al dar positivo en control antidopaje por pasaporte biológico. Con ella también subieron al podio Juan Carlos Higuero y Arturo Casado. «Estuve en la zona VIP. Es algo agradable, aunque no tiene nada que ver si hubiera sido en directo porque habría estado alteradísima», dice Poves.

Lo suyo fue, al menos, un consuelo. «Subir un peldaño en el podio siempre está bien y reconocer lo que te toca. Aún me quedo corta porque la de oro no llegará. Lasmanova también ha dado positivo, pero no tenía pasaporte biológico. Esto se hace con los años. La tenía que haber ido a recoger la medalla a la Copa del Mundo que se celebró este año en la localidad china de Taikang. Pero estaba recién operada y no me dejaban salir a buscarla. Me pagaban el viaje, pero la delegación española me la trajo», afirma Poves, que también reconoce que ese fue su mejor año. «Estaba como un avión. A los hechos me remito porque me ganaron dos dopadas. Competíamos en su casa con el equipo estrella de Rusia y ni aún dopadas me ganaron. Había cinco rusas y cinco chinas». Recuerda con el tiempo esa memorable carrera. «Fue impresionante. Me encontraba supermegabien. En el kilómetro 15 iba tercera y no tenía nervios. Cuando estás tan en forma tienes muy buenas sensaciones», dice.

La marchadora zaragozana reconoce que por aquellos años «admirábamos a las rusas. Pero ya nos olíamos algo. Eran muy frías y no eran muy sociables. No podían ser unas marchadoras tan buenas...», reconoce. Poves piensa que la vida le habría cambiado si le hubieran dado la plata o el oro en directo: «Me hubiera cambiado mi carrera deportiva a todos los niveles».

Los Juegos de Londres

Después disputó los Juegos en Londres. «Fui la undécima al descalificar a Kaniskina. Pero ya llegué lesionada por el problema del isquiotibial. Podía haber sido finalista. Mi cuerpo por fuera ha sido muy blando. Me funcionaba la cabeza, pero no el físico». Tras tantos años de duro entrenamiento llegaron las lesiones y las operaciones. «Este año me han operado de un isquiotibial, el hombro y me falta el tobillo. A partir de ahora marcharé en la Liga y disputaré populares. También quiero formar un grupo de entrenamiento», concluye.