Juventus y Mónaco dirimirán hoy el primer finalista de la Liga de Campeones, en una vuelta de semifinales donde el equipo italiano buscará confirmar una presencia en Cardiff que ve cercana tras el favorable 0-2 de la ida, mientras el monegasco confía en Kylian Mbappé para una remontada casi imposible. El doblete del argentino Higuaín en Mónaco, hace apenas seis días, da todo el favoritismo a la Juve, que además contará hoy con el apoyo de una afición que llenará su estadio en busca de ver como su equipo se planta en una final en la que ya estuvo en el 2015, cuando la perdió ante el Barcelona.

En el Mónaco, la esperanza para una remontada que sería histórica para el club tiene un nombre propio: su joya Mbappé, de 18 años y que en la ida se encontró con el muro de Gianluigi Buffon, el veterano portero de 39 años que cuando Mbappé nació ya había participado en una Copa del Mundo con Italia.

La historia europea es favorable al club turinés, que nunca desaprovechó una victoria fuera de casa en la ida de una eliminatoria. Tras el resultado de la ida, las estadísticas sonríen a un Juve que lleva una racha de seis partidos europeos seguidos sin recibir goles (621 minutos).