Sergio Ramos inició la remontada del Sevilla con un cabezazo poderoso hacia su portería, Carvajal y Benzema la pifiaron en la jugada que dio pie al segundo tanto sevillista, pero el gran señalado por la derrota que puso fin a la racha blanca de 40 partidos sin perder fue Keylor Navas. El portero costarricense vuelve a estar en el punto de mira de los más críticos con sus actuaciones desde su reaparición y Florentino Pérez, que en su círculo de íntimos nunca ha ocultado que prefiere otro tipo de guardameta para el Madrid, se dispone a mover ficha para hacer posible el relevo que ya intentó, con ridículo incluido, en el último día de mercado de verano del 2015. David de Gea se quedó en el Manchester United y el papel de Navas acabó resultando capital para la conquista de la Undécima en Milán.

Ahora, aunque de puertas para afuera el entrenador y sus compañeros le respaldan, lo cierto es que la gran mayoría piensa que la falta de seguridad que exhibe el costarricense desde su vuelta al equipo no decrece, lo que pone en serio peligro alcanzar los objetivos ahora que la temporada entra en su fase más exigente.

«Sabíamos que un día iba a pasar esto… No va a cambiar nada, y ganando tampoco habría cambiado nada. Tenemos que digerir la derrota. A nadie le gusta perder y menos de esta manera. Hay que pensar en la Copa», se limitó a decir Zidane tras caer en el Pizjuán, sin entrar a analizar los errores de sus jugadores que facilitaron las cosas al Sevilla.

SUCESIÓN DE FALLOS

De eso ya se han encargado las decenas de analistas que han desmenuzado las jugadas clave del partido. Buena parte de ellos coinciden en que Navas fue casi tan culpable como Ramos en el primer gol del equipo andaluz por quedarse clavado bajo el larguero y no intentar atajar el balón lanzado por Sarabia. Y, por supuesto, se le atribuye casi toda la responsabilidad por su mala colocación en el tanto de Jovetic que decidió el encuentro en el tiempo añadido.

El propio Navas no dejó de reconocer su culpa en ese segundo gol en el estadio sevillista, consciente de que su situación se complica, sobre todo cara a la temporada que viene. Desde su reaparición el 27 de septiembre ante el Dortmund en el Signal Iduna Park, en que un mal despeje de puños facilitó el gol a Aubemayang (2-2), falló en Mendizorroza el 29 de octubre (1-4) y estuvo mal colocado en el tanto del empate a dos de Radovic en Varsovia ante el Legia el 2 de noviembre (3-3).

Una sucesión de errores que vuelven a destaparse ahora que se ha truncado la tendencia positiva del Madrid. Incluso se apunta que el vestuario prefiere a Kiko Casilla en la Liga. Thibaut Courtois, portero del Chelsea, es el preferido, aunque por si acaso Mourinho ha pedido al Manchester United que amplíe el contrato a De Gea un año más, hasta el 2020, y le suba la ficha, hasta los 12 millones, según The Sun.