Lo primero que señaló el director deportivo del Austria Viena, Gunter Kronstainer, al personarse ayer en la rueda de prensa fue que añoran su viejo estadio, el Franz Horr, y que consideran que el hecho de que la UEFA les halla obligado por normativa a jugar en el Ernst Happel no les beneficiará en absoluto. "Será muy perjudicial para nosotros porque estamos acostumbrados a nuestro campo y porque aquí será muy complicado que logremos que haya la misma presión", dijo el representante del cuerpo técnico del equipo austriaco. Esa preocupación está justificada porque a última hora de la tarde se habían vendido tan sólo 13.000 localidades para el partido contra el Real Zaragoza, cuando el aforo del estadio es de 40.000. "Como mucho acudirán unos 20.000 seguidores", se lamentó de nuevo el director deportivo, que habló en lugar del entrenador, el danés Lars Söndergaard.

El Ernst Happel, que albergará la final de la Eurocopa del 2008, evento que organizarán entre Suiza y Austria, es un estadio en toda regla, un recinto con pistas de atletismo y una frialdad contagiosa por la distancia que existe entre las gradas y el terreno de juego. Su aspecto, porque que es un campo relativamente joven, resulta atractivo, con una estética muy propia de los años 80. A su favor tiene que es totalmente cubierto, pero para el campeonato continental de selecciones que se celebrará en él necesitará alguna reforma. En la sala de prensa, como legado de la historia deportiva del país, cuelgan orgullosas imágenes de la derrota que infligió en este mismo campo Austria a la vecina y poderosa Alemania (4-1). También hay un retrato de Maradona...

Todo indica que el conjunto aragonés, en ese escenario, no se sentirá en absoluto intimidado. Muy al contrario, podrá sacar provecho de una atmósfera muy distinta a la que hubiera vivido en el Franz Horr, un trasnochado cajón para 11.000 aficionados que la UEFA ha desestimado no apto para sus torneos y donde el Austria Viena disputa sus encuentros de Liga mucho más arropado.

ELOGIOS PARA SAVIO Kronstainer también comentó su punto de vista sobre el Real Zaragoza, e hizo especial hincapié en un jugador: "Savio nos preocupa porque es un gran futbolista al que ya conocíamos de su etapa en el Madrid. Se encuentra en un excelente momento de forma". El técnico apuntó que han seguido con especial interés al conjunto de Víctor Muñoz. "Lo vimos en Olomouc, y también cuando jugó contra el Utrecht y el Sevilla. Sin duda es el gran favorito para este encuentro". En cualquier caso, advirtió que "pese a todo, podemos vencer si ellos nos subestiman. Cometerían un error del que intentaríamos sacar provecho".

"No vamos a subestimarles lo más mínimo porque es un equipo que nos merece mucho respeto", se apresuró a subrayar Víctor Muñoz cuando fue interrogado en este sentido. El Real Zaragoza, según su entrenador, va a salir desde el primer segundo "a ganar. Es nuestro objetivo prioritario". El triunfo supondría un salto casi definitivo para pasar a la siguiente ronda de la Copa de la UEFA a falta aún de los partidos ante el Dnipro y el Brujas. "Por eso vamos a salir con muchas ganas, sin ánimo de especular", explicó el técnico aragonés.