Se acabó la temporada para Pau Gasol. El pívot de Los Ángeles Lakers sigue con molestias relacionadas con el problema de vértigo que sufre desde hace casi un mes y necesitaría "al menos dos semanas" más para estar en condiciones de volver a saltar a la cancha, según ha informado el club a través de su página web, por lo que se perderá los dos últimos partidos que le restan a su equipo, ambos a domicilio, frente a los Utah Jazz y los San Antonio Spurs.

El propio pívot se ha hecho eco de la noticia en su perfil de Twitter, donde ha escrito: "Desafortunadamente, no podré jugar lo que resta de temporada ya que sigo en proceso de recuperación". Pese a ello, acompañará a sus compañeros en ambos desplazamientos. De hecho, este domingo ha seguido atentamente el partido que han disputado contra los Memphis Grizzlies, que ha acabado con victoria del equipo en el que milita su hermano Marc (90-102).

Gasol se convertirá este verano en agente libre y podrá decidir dónde quiere continuar su carrera en la NBA. Si abandona los Lakers, será una despedida amarga, pues, con la derrota frente a los Houston Rockets del martes pasado (130-145), el equipo ha certificado la peor temporada en toda su historia desde su traslado a Los Ángeles en 1960.

El gerente general, Mitch Kupchak, ha asegurado en declaraciones al diario local 'Los Angeles Daily News' que la franquicia tiene "un gran interés" en volver a contar con Gasol. "No veo por qué no habría de haber interés. Es un futuro miembro del Salón de la Fama. Pero al convertirse en agente libre, saldrá al mercado. Y al salir al mercado, tenemos que ver cómo se suceden los movimientos", ha manifestado.