El embalse de Arguis ha sido el escenario elegido para la organización del curso de iniciación a la pesca puesto en marcha por la Federación Aragonesa. El pasado sábado finalizó la séptima edición en la que participaron cuarenta niños de entre 7 y 15 años durante las tres jornadas disputadas en el coto deportivo de la escuela de Arguis. Los alumnos se repartieron por grupos dependiendo de su experiencia y edad.

En el cursillo se impartieron clases teóricas y prácticas de la pesca a trucha sobre diferentes modalidades por parte de técnicos y monitores del organismo territorial. Los más jóvenes tuvieron la oportunidad de aprender la pesca con caña larga a cebo natural o con caña corta y cucharilla con cebo artificial. Las charlas didácticas también sirvieron para la puesta en escena de la pesca a mosca con cola de rata. El programa incluía conocer además la morfología de las especies autóctonas y protegidas de nuestra comunidad o los peligros que conlleva introducir una nueva a las ya existentes.

La sensibilización

Los organizadores hicieron especial hincapié en sensibilizar a los jóvenes aficionados en el respeto y conservación del medio ambiente. Por este motivo, las clases se desarrollaron bajo la especialidad de captura y suelta . Además, cada niño pudo participar en el montaje de las cañas, la utilización de los carretes y el lanzamiento en el embalse con caña larga y cucharilla.

El director del curso, Angel Cetina, percibe este tipo de certámenes como un gran trampolín para futuros competidores. "Aragón suele ser siempre cuna de campeones. Esperemos que de esta hornada salgan deportistas porque ahora mismo estamos escasos de infantiles y juveniles", señala Cetina. El aprendizaje con los niños "es más gratificante. Se está trabajando decididamente con la cantera pero además no dejan de sorprendernos. Muchas veces los ves pescando y te quedas perplejo con la actitud y aptitud que demuestran. Algunos tienen una habilidad instintiva para manejar la caña".

Por su parte, el presidente de la Federación Aragonesa, Ramón Rodríguez, destaca que "lo mejor que tenemos son los jóvenes. Nos tenemos que volcar con ellos puesto que son el futuro de la pesca deportiva en esta región". En este sentido el delegado provincial, José Pablo Manau, se mostró satisfecho por "el buen desarrollo de la actividad y el tiempo reinante. Los alumnos estuvieron muy bien y han demostrado un gran interés asimilando con prontitud los consejos y enseñanzas recibidas".

La población de truchas para este curso aumentó gracias a la cesión de peces procedentes de las piscifactorías de Oliván y El Grado. La gran cantidad y actividad de éstas, sumado al buen nivel de agua, la nitidez del embalse y una climatología propensa para la práctica de la pesca lograron colmar los objetivos previstos durante los tres fines de semana.