Los jugadores del Real Zaragoza se lamentaron ayer de no haber podido conseguir la victoria en el campo de El Madrigal y se quejaron de la actuación realizada por el colegiado madrileño Del Cerro Grande. "No he hecho penalti a Mario, estoy seguro. Ha podido haber contacto, pero el contrario no se ha caído porque yo le haya agarrado de la camiseta. Creo que el árbitro nos ha perjudicado en esa y en otras acciones", dijo Maurizio Lanzaro, que, además, fue expulsado por acumulación de dos amonestaciones. "En la segunda tarjeta amarilla agarró un poco al rival, pero la primera me parece muy rigurosa", dijo el defensa italiano. Además, Lanzaro añadió sin dudarlo: "Hemos hecho un buen partido ante un rival importante y me voy con la impresión de haber perdido dos puntos".

De manera similar opinaba Luis García, autor del primer gol zaragocista, sobre el resultado final del partido disputado en campo del Villarreal. "Puntuar fuera de casa siempre es bueno, pero esta vez el punto tiene un sabor agridulce, porque hemos estado cerca de ganar. Hemos jugado bien, pero nos ha faltado matar el partido. Lo importante es que el equipo sigue dando buenas sensaciones", dijo el asturiano, quien también puntualizó: "El penalti que le han señalado a Lanzaro es riguroso. Si el árbitro lo hubiera tenido claro le hubiese mostrado entonces la segunda amarilla".

El portero Roberto, que en El Madrigal volvió a realizar varias paradas de mérito, también se fue más contento con la actuación del Zaragoza que con el resultado. "Es un buen punto, pero pudimos ganar. He podido ayudar al equipo y eso siempre es gratificante ", dijo el meta.