No por repetido deja de ser bonito: «Es el resultado soñado para la Sociedad Deportiva Huesca». Así arrancó Leo Franco su intervención tras el triunfo en Ipurua en su estreno en Primera. No es para menos. «Llevábamos mucho tiempo trabajando desde que se consiguió el objetivo. Estamos muy contentos por los jugadores, han hecho un trabajo excepcional, lo han dejado todo en el campo y les estoy muy agradecido. Ha sido digno de ver», comentó el técnico argentino, que también estrenó su andadura en los banquillos con el mejor sabor de boca posible.

El entrenador azulgrana consideró que la clave del encuentro fue meter el 0-1 tan pronto, ya que «nos generó muchísima confianza y tranquilidad y nos permitió llevar el ritmo del partido». Después, Leo Franco sabía que al final iban a sufrir: «Puedes dominar el partido, pero en los últimos minutos siempre terminarán de la misma manera», dijo, pero al final se llevó el Huesca un merecido triunfo.

«Magia» / Como no podía ser de otra forma, el argentino se marchó «contento por el resultado» y porque «se vieron cosas muy buenas», pero no ocultó que «hay que corregir y revisar». Aún así, delante había un rival «realmente poderoso porque lleva muchos años en Primera, consolidado y que tiene un entrenador que me gusta mucho». Además, Leo Franco ensalzó la labor defensiva del equipo ante los buenos delanteros del Eibar.

De todos modos, el argentino no oculta que «la temporada va a ser dura y habrá momentos en los que las olas sean grandes», pero espera que «esa magia que llevamos desde el ascenso con la afición ojala continúe».

De momento, los primeros tres puntos ya están en el casillero y ayudan a que «el equipo se convenza de que puede competir y que es posible tener este tipo de resultados. Es fundamental para un debutante a nivel mental», apostilló un Leo Franco que también tuvo un debut feliz.