El lateral del Huesca Pedro López quiso dar voz al vestuario para explicar lo sucedido el pasado domingo en Vallecas. «Nos chocó personalmente la actitud del árbitro hacia nosotros. En cada jugada era ‘no os cojais que pitaré penalti’, ‘cuidado que no te voy a pitar ninguna’... Cosas que no se ven desde fuera, y esto es lo feo, que estás jugando y te sientes amenazado en cada jugada y atenazado por los comentarios del árbitro», aseguró el lateral azulgrana.

Al colegiado valenciano Ais Reig no le tembló el pulso para anular por mano el 0-1 de Okazaki y, en cambio, sí consultó con el VAR una dudosa mano de Josué Sá en el posterior penalti para el Rayo Vallecano. «No lo sé, aún nos lo preguntamos en el vestuario. Bajo nuestro punto de vista fue decisivo por momentos del partido en los que nos perjudica. Constantemente pasaba algo raro y no lo entendíamos», afirmó el lateral, que no quiso centrarse únicamente en el árbitro, consciente de que el Huesca volvió a fallar lejos del Alcoraz. «Tenemos que ver que hicimos cosas mal en el partido. Hubo momentos en los que nos desorganizamos fácilmente y esto es lo que no puede volver a pasar, independientemente del resultado o en las circunstancias del partido», asintió el valenciano.

El equipo no consigue reencontrarse en los partidos fuera de casa y esta dinámica debe cortarla ya si quiere tener aspiraciones al final de temporada. «Nos nos gusta pero no podemos venirnos abajo. Este equipo no ha parado de trabajar, venimos de un resultado muy malo pero hay que levantarse y ponerse en pie», afirmó López asumiendo que el equipo tiene otra oportunidad contra el Extremadura de devolverle a la afición toda la entrega que muestran. «Intentamos que disfruten en cada partido, jugamos por y para ellos y queremos brindarles todas las victorias. Somos fuertes en casa, esperamos ya el sábado para jugar bien al fútbol y estar arriba en la tabla», concluyó el defensa.