El 25 de enero del 2003 Lucio Angulo disputó su último partido con la selección absoluta, un España-Grecia que terminó con un 94-91. Fue el último aragonés en disputar un encuentro con el primer combinado nacional. Quince años y un mes después puede darle la alternativa Rodrigo San Miguel. «Me enteré de que había sido el último vía redes sociales. Desgraciadamente hacía mucho que no había un aragonés en la absoluta y afortunadamente se ha roto eso y qué bien que haya sido con Rodrigo», indica Angulo.

El exjugador celebra que San Miguel haya recibido este premio a su ya larga trayectoria. «Engaña porque es del 85 y con esa cara de niño parece que no ha hecho nada pero lleva muchos años y muchos equipos. Es muy difícil haber mantenido el tipo en Manresa, Valencia, Murcia, ahora en Tenerife. Esto es otra medalla más para él como jugador y para Aragón por lo que representa», asegura.

Lucio Angulo empezó su andadura en la absoluta en 1996, aunque no recuerda muy bien los inicios. «Me gustaría darle romanticismo y contar alguna anécdota pero tengo la memoria de un pívot», justifica con humor. Después tuvo una presencia más o menos continuada aunque dice que uno nunca se acostumbra del todo a recibir esa llamada. «Es saber que estás haciendo bien tu trabajo, ir con la selección siempre es muy especial. Primero estuve en la selección de Herreros, de mi hermano, de Dueñas, que para mí era una selección muy grande. Y luego coincidí con la generación de los 80, tuve la suerte de hacer un poco de puente porque empezaron a venir Navarro, Gasol. Luego ya su talento me arrastró y con buen criterio me apartaron», añade. Con la absoluta se colgó el bronce en el Europeo del 2001 en Turquía.

Como recuerdo para toda la vida le quedará haber sido el primer compañero de Pau Gasol enla selección. «Como habíamos tenido un problema en el playoff Javier Imbroda decidió ponernos juntos en la habitación. Luego Pau siempre ha compartido habitación con Navarro, pero eso es algo que me llevaré, fui el primero en compartir habitación con Pau en la selección. Es un pequeño placer que me queda», indica. También compartió habitación con su hermano Alberto. «Creo que dormimos más tiempo juntos fuera de casa que en casa, porque teníamos habitaciones separadas y no nos veíamos tanto», apunta.

Ahora es algo extraordinario ver a un aragonés en la absoluta. En los tiempos de Lucio Angulo se había convertido casi en una costumbre. «Como referente tuve a los Arcega, y la suerte que tuve de jugar con Fernando y Pepe. Han sido unos referentes en Aragón e internacionalmente han tenido mucho prestigio. Pero ahora sí que ha habido un vacío que esperemos que se recupere porque sí que hay cantera con los Carlos Alocén, Jaime Fernández, los chavales jóvenes de Zaragoza», explica.

La pérdida de la élite en Zaragoza es uno de los motivos que, a su juicio, explican ese vacío. «Lógicamente cuando hay una unidad en el trabajo se construye mejor. Y en Zaragoza al no tener ese referente, al perder la plaza en ACB, fue como un vacío, un peregrinaje por la LEB que también hace mella porque la economía es menor, todo se ve reducido», señala. Además, las canteras se han transformado radicalmente. «Acaba de celebrarse la Minicopa y ves en las plantillas jugadores africanos, franceses, de todas partes, que vienen muy jóvenes. La exigencia es mayor y tapona un poco a gente que antes hubiera tenido más minutos», indica. Aragón ha tenido 15 internacionales absolutos desde Fernando Muscat en 1935, pasando por Epi, Alfonso y José Luis Martínez, Lorenzo Alocén, Paco Zapata, Javier Sanjuán, Julio Descartín, Pérez Loriente, Martínez Sansegundo, Emilio Galve, los Arcega y los Angulo. San Miguel puede ser el decimosexto.