""¿Xavi? Le conozco, es un amigo, es un excompañero. Podría hablar maravillas de él. Nos sentaremos, hay que esperar a decidir cosas. Lo qué quiere él y lo que queremos nosotros". Con esa respuesta tan ambigua ha abordado Luis Enrique, el nuevo entrenador del Barcelona, el futuro del capitán, que tiene contrato hasta el 2016.
A la espera de una reunión que deben tener el técnico y el jugador azulgrana, que se marcha a la concentración de la selección española para el Mundial de Brasil, que empieza en menos de un mes. No ha querido dar muchas pistas Luis Enrique, que sí ha sido, en cambio, muy contundente con Messi.
"Messi nos tiene acostumbrados a meter 700.000 goles por temporada y si mete 100.000 parece poco. Estoy encantado y maravillado de tener al mejor jugador del mundo. Su rendimiento esta temporada", ha dicho, "no ha sido tan increíble como otras veces. Pero sigue siendo impresionante. Aporta más cosas que sus goles", ha recalcado el entrenador azulgrana, convencido de que Mascherano, por ejemplo, podría "ser un buen capitán"
Pero uno de sus grandes desafíos será recuperar al delantero argentino. "Messi va a ser un referente, espero que conmigo encuentre la mejor versión", ha subrayado el técnico,que tampoco ha querido precisar sobre el futuro de Cesc y se ha limitado a decir que está "encantado" de poder entrenar a Neymar.
