El Málaga, con dos goles del exrojiblanco Diego Alonso incluidos, se mete en la lucha por una plaza en la Copa de la UEFA, gracias a su triunfo por 3-1 sobre un Atlético de Madrid que naufragó allí donde esperaba sentenciar su presencia europea y, además, sufrió la expulsión de su estrella, Fernando Torres.

Todo fueron malas noticias para el Atlético, que se planteaba el encuentro como una final, como un paso casi decisivo para asegurar la UEFA y, ahora, se encuentra con un rival más y, probablemente, sin el concurso de Fernando Torres en el derbi del próximo sábado, contra el Real Madrid. La expulsión de Torres fue la imagen de la impotencia atlética frente al ímpetu de los malaguistas.