El Manchester United ha anunciado el fichaje del central Harry Maguire del Leicester City por 80 millones de libras, unos 88 millones de euros, una cifra récord mundial por un defensor. El jugador de 26 años, baluarte en la zaga defensiva de la selección inglesa, ha firmado un contrato de seis años, con la opción de uno más. El precio supera el que pagó el Liverpool para incorporar al central Virgil van Dijk en enero de 2018.

Maguire firmó este lunes junto a su nuevo entrenador, Ole Gunnar Solskjaer, y ha definido su etapa en Old Trafford como "una gran oportunidad". "Está claro que Ole está formando un equipo para ganar trofeos, estoy deseando conocer a mis nuevos compañeros y comenzar la temporada", agregó.

CARÁCTER DE LÍDER

En un mercado con tendencia a la inflación, la cruda realidad es que el Manchester United ha pagado una suma récord para un jugador que se les ofreció por solo unos 18 millones de euros hace dos veranos. Lo pescaron los foxes de Leicester, procedente del Hull City, y se convirtió en una figura imprescindible por su corpulencia (1,94 m), potencia y carácter de líder.

La esperanza para Solskjaer es que, con el tiempo, el dinero parezca bien gastado, como así lo han sido los de Van Dijk con el Liverpool. El impacto del holandés ha sido espectacular y, desde su llegada, los de Merseyside han alcanzado dos finales de Champions, de las cuales han ganado una, y han luchado por la Premier League hasta el final. Como Klopp, Solskjaer quiere un central que aporte liderazgo, calma y autoridad a un eje defensivo demasiado vulnerable que la temporada pasada concedió 54 goles solo en la liga.

EL 'CABEZOTA'

Maguire es apodado con cariño 'Slabhead' (cabezota) por sus compañeros de equipo, tanto por su capacidad rematadora como por su imponencia defensiva, sin mencionar su calidad con el balón. Toda una roca para los de Solskjaer, que ha reforzado la línea de atrás con otro fichaje, el lateral Aaron Wan-Bissaka, una de las revelaciones de la Premier con el Crystal Palace.

Esto sí, el ex del Leicester se convierte en el séptimo central del United, junto a Lindelof, Smalling, Jones, Rojo, Axel Tuanzebe y Eric Bailly, y está claro que el club deberá tomar decisiones para este 'overbooking' de defensas.

El nombre de Maguire también sonó para el Manchester City de Pep Guardiola, deseoso de convertirle en el sustituto de Kompany. Los rivales ciudadanos no entraron en la puja ante un United más necesitado y que no descarta el anuncio de nuevos fichajes antes del cierre del mercado inglés, este jueves.