Bien se sabe que el maratón es una de las pruebas más duras del deporte. Acabarlo supone, en la mayoría de los casos, todo un reto personal. Por eso, los hay que intentan burlar sus normas para finalizarlo sea como sea. En contra de todos ellos, los organizadores, que llevan años luchando contra el fraude competitivo, han puesto en marcha una serie de medidas que pretenden acabar con las trampas. El primer maratón español en llevarlas a la práctica será el de Guadalajara, que se celebrará el próximo 5 de noviembre.

Así, por primea vez en la historia, un maratón español pondrá candados a los tramposos. Corredores de observadores, un operativo especial de jueces captando los números de los atletas que corten la ruta, un reporte de chips desde el disparo de salida, un arco de meta especial y 12 puntos de control, son algunas de las medidas que el comité organizador del Maratón de Guadalajara llevará a cabo en contra de aquellos que decidan saltarse las normas. El objetivo, hacer justicia para quienes se hayan preparado el maratón.

Concienciar, no sancionar

Los puntos de control más extrictos de la ruta se aplicarán sobre las principales calles y avenidas de la zona metropolitana. Durante estos tramos, los corredores estarán perfectamente identificados por el operativo especial de jueces. Eso sí, no habrá sanciones ni se señalará a los tramposos. Porque el principal objetivo de las medidas es generar conciencia entre los corredores y destacar a aquellos que entrenaron con determinación para terminar la prueba. La prueba de Guadalajara reunirá a más de 8.000 atletas