Mari Carmen Castillo es el prototipo de presidenta de club de fútbol. Elegante y de mediana edad, es una mujer comprometida, con don de gentes y fuerte carácter. Es la presidenta del Tauste, el equipo aragonés de Regional Preferente, la categoría más alta que dirige una presidenta del fútbol regional aragonés. Lleva el mando de la entidad hace tres años. "Es un tópico que el fútbol sea machista. No sé por qué no hay más mujeres presidentes en el fútbol. Hay que comprender que para una mujer es diferente. Aunque en mi casa yo soy la que va al fútbol", dice Castillo.

Tauste destaca por la cantera de lanzadores de atletismo y los 150 niños que practican natación. Aunque en la localidad cincovillesa de 7.000 habitantes el fútbol es el deporte rey. Aunque Castillo reconoce que la grada no es demasiado caliente. "Aquí vienen a ver los partidos 200 personas. Somos una afición muy fría. No nos pronunciamos ni para bien, ni para mal. Me gustaría que la afición animase más al equipo. Yo soy tranquila en la grada, pero los nervios me comen por dentro", proclama. Castillo llegó a la entidad hace diez años. "Entré en la junta cuando mi hijo Alejandro empezó a jugar a fútbol en el equipo infantil", dice.