No era fácil, no, había que comportarse como Rafa Nadal y devolverle la pelota a Ducati, que nos había golpeado el primer día, en el FP1, y había que devolver el golpe», comentaba Marc Márquez (Honda, 1.23.241 minutos), 77 pole positions de su carrera, 49 en MotoGP (nadie ha conseguido tanto), en el micrófono de Movistar en el corralito de Spielberg, donde se celebra el Gran Premio de Austria.

Todo parece indicar que hoy asistiremos (14.00 horas), como ya ocurriera el pasado año, a una lucha tremenda entre las dos Ducati, la de Andrea Dovizioso (2º, a dos milésimas) y Jorge Lorenzo (3º, a 0.135 segundos). La igualdad es tal entre los tres, que los tres ocuparon idénticas posiciones, el pasado año, el sábado, es decir, se repite la primera línea de parrilla. El final del GP fue, recuerden: Dovi, Márquez, separados por centímetros, y Dani Pedrosa (Honda).

La calificación fue tremenda, vibrante y muy igualada por los tres grandes protagonistas del campeonato. Márquez logró, en su tremendo y estratégico fin de semana, cuatro de los mejores cronos (1.23.810, 1.23.511, 1.23.395 y el definitivo 1.23.241), mientras que Lorenzo puso en cuestión su poder con un 1.23.415 a mitad de tanda que amenazó el dominio del mallorquín, que provocó a Dovi, que terminó a dos milésimas del tetracampeón catalán.

«La verdad es que la estrategia no era esa, es decir, habíamos pensado hacer tres intentos con tres neumáticos diferentes pero, una vez acabé el segundo, pensé, quédate en la pista y sigue, pero ya no pude rebajar más el crono», explicó Márquez, que reconoció que era tan feliz ganando por dos milésimas que por dos segundos. «El caso es que se nos presenta una pelea durísima con las dos Ducati, que aquí, ya lo sabíamos, están muy, muy, fuertes, pero nosotros también. Veremos cómo nos defendemos», concluyó el de Cervera, al que solo le falta ganar en este circuito en MotoGP.

La verdad es que junto al extraordinario papel de Tito Rabat, séptimo con una Ducati ‘satélite’, el resto de españoles deberá conformarse con arrancar desde atrás: Pedrosa, desde la tercera fila, Álex Rins (Suzuki), Maverick Viñales (Yamaha) y Álvaro Bautista (Ducati), desde la cuarta. Claro que Valentino Rossi (Yamaha), que ni siquiera pudo meterse en la quali de los ‘reyes’, arrancará desde la discretísima e inesperada 14ª posición.

Jorge Lorenzo concluyó el entrenamiento definitivo lamentando no haber cambiado el neumático delantero, aunque mostró su felicidad porque, de nuevo, arrancará el GP desde la primera fila. «La cosa está muy, muy, igualada y creo que se verá una preciosa carrera. Los tres estamos para ganar, veremos cómo jugamos nuestras cartas».