Los nervios se instalaron en el Granada. Tanta fue la tensión que fueron visibles varios roces entre los jugadores y Eugenio Llera, que se hizo cargo del equipo tras la exclusión de Valdeolmillos. Así, Aaron McGhee insistió al auxiliar la entrada a pista de Fernández, entonces en el banquillo. El cambio se realizó de forma inmediata. Además, Llera mandó a Mills al vestuario sin que el estadounidense, que sólo jugó un minuto, le hiciera caso.