Han pasado solo tres partidos desde el desastre de Gran Canaria, el día que el Tecnyconta tocó fondo, y se advierte un cambio en el conjunto aragonés. No tiene categoría de transformación, no puede decirse que el equipo sea otro, es solo una tendencia pero una tendencia positiva al fin y al cabo. En estas jornadas el Tecnyconta ha mejorado sus números defensivos rebajando en casi diez puntos la media recibida por partido. Por el contrario también ha disminuido el número de puntos anotados por semana, de ahí que la permuta haya pasado más desapercibida. Resumiento mucho, en los partidos del equipo aragonés ahora se ven menos puntos, en los dos lados de la pista.

Simplificando, se ha convenido en identificar una buena defensa con pocos puntos encajados, que es mucho simplificar. No siempre son sinónimos absolutos pero al menos esa cifra es un buen indicativo, un síntoma. No hacía falta saber mucho más sobre el equipo para entender que recibiendo cien puntos de media como le ocurría al Tecnyconta hasta hace mes y medio no se podía llegar muy lejos. Por ese motivo, entre otros muchos, el club decidió cambiar de entrenador y en eso ha trabajado Luis Guil desde su llegada.

Aunque no lo pareció los primeros días, tanto el técnico como el club aseguraban que el trabajo en esa faceta había mejorado. Los resultados ya pueden verse sobre la pista. Desde el descalabro del Gran Canaria (57-102) los números han cambiado. Hasta esa jornada, la 26, el Tecnyconta era la penúltima defensa de la Liga con 84,60 puntos por partido. En las tres jornadas posteriores a ese encuentro su media de puntos recibidos es de 75. Casi una decena de mejora.

El avance, sin embargo, no es completo. El Tecnyconta ha conseguido reducir esa sangría por la que se le estaba escapando hasta la categoría, pero también ha empeorado su ataque. De nuevo hay que atenerse a la simplificación numérica. Hasta la jornada 26 anotaba 79,48 puntos por partido. En los últimos tres se ha quedado en un promedio de 71 por jornada. Es decir, que continúa recibiendo más puntos de los que anota y con una diferencia similar. Antes era de -5 y ahora, de -4.

Así, con esa tendencia que no le ha llevado al equilibrio, el equipo solo ha podido ganar un partido de estos tres, ante un rival directo como el Joventut pero por una diferencia exigua, de únicamente dos puntos. También es cierto que sus otros dos oponentes, Tenerife y Barcelona, se sitúan ahora mismo varios peldaños por encima del Tecnyconta. Todavía debe, pues, mejorar el equipo aragonés porque aún no tiene asegurada la salvación. El domingo tiene una nueva e importante cita ante el UCAM Murcia, donde dispondrá de una oportunidad más para lograr un triunfo fuera de casa, otro de sus talones de Aquiles esta campaña. De momento el Tecnyconta solo ha sido capaz de ganar una vez fuera de Zaragoza. Para salvarse seguro, sin atender a los rivales, necesitará ganar como mínimo uno, si no los dos, encuentros que le quedan fuera de casa. Al equipo zaragozano le queda poco tiempo pero aún puede y debe mejorar porque todavía no ha conseguido su objetivo.