A pesar de la importancia que tiene la Copa, es imposible desviar la atención del próximo compromiso liguero por dos motivos. La situación que atraviesa el Huesca requiere una victoria con urgencia para llegar a navidades con más tranquilidad. Y, además, será la primera vez esta temporada que uno de los equipos grandes del campeonato visita El Alcoraz. Una cita especial también para Melero, con pasado madridista: «He estado muchísimo tiempo en la cantera del Real Madrid, he sido del Madrid desde pequeño, he ido al Bernabéu cientos de veces y va a ser especial. Pero no creo que haya nadie en el vestuario con más ganas de ganar que yo, por mucho que haya crecido allí», comentó ayer
La vuelta al trabajo de Gonzalo Melero es la mejor noticia que presenta la actualidad oscense. Francisco recupera a su principal jugador, al hombre que aporta ideas al escaso juego que ha caracterizado al equipo durante las semanas que el mediocentro madrileño ha estado en la enfermería. Con su regreso, el Huesca quiere volver a recuperar la chispa en su juego, y la prueba de mañana (18.30 horas) es el primer paso para preparar el importante choque ante el Real Madrid. «Hay que intentar ganar, que nos hace falta. Si somos capaces de acercarnos, pelearemos la eliminatoria», dijo ayer Melero, que aseguró que hay que aprovechar el «momento delicado del Athletic (por la reciente destitución de su entrenador, Eduardo Berizzo) para ganar».
Es probable que el 8 azulgrana pueda disfrutar de sus primeros minutos al haberse recuperado de la pubalgia que le ha dejado fuera de la actividad del equipo durante el último mes. «Han sido unas semanas jodidas, a nadie le gusta estar lesionado», destacó Melero. De hecho, reconoció que sufrió al ver las derrotas del club «más desde fuera que desde dentro, sin poder ayudar, viendo cómo luchan los compañeros. En algunos partidos hemos estado mejor que otros, pero el trabajo del equipo es bueno. Hay que seguir confiando en el día a día y corregir los errores, pero con convicción de que las cosas van a cambiar», apostilló.
Por fortuna, la lesión ya es solo un mal recuerdo. El centrocampista se unió al grupo el pasado jueves, y lleva trabajando al mismo ritmo que sus compañeros desde entonces. «Estoy a disposición de Francisco, con ganas de sumar y ayudar al equipo», apuntó.
Gonzalo Melero fue una pieza clave en el ascenso a Primera División, con 16 goles, y su próximo objetivo es ayudar al equipo a terminar de dar el último empuje para conseguir la victoria. No obstante, antes de regresar a la Liga toca hacer los deberes en el torneo copero. «El equipo no puede mirar rivales o en qué partidos es más fácil sumar. Hay que centrarse en el choque ante el Athletic, aunque obviamente el de Liga sea primordial. Dejarse llevar contra el cuadro vasco no significa que se consiga una victoria el domingo. Hay que coger convicción en la Copa de que al Madrid también se le puede ganar».
