Reencontrarse con la familia para rememorar grandes momentos es lo que aconteció ayer en el pabellón del Doctor Azúa de la capital aragonesa. Y es que se cumplieron 20 años de la gesta más importante del baloncesto del colegio, cuando un grupo de chavales de la generación de 1985, capitaneados por Rodrigo San Miguel, se proclamó subcampeón del Campeonato de España infantil de baloncesto después de caer en la final ante el Real Madrid (72-59). «Era un equipo que apuntaba mucho y ya había ganado a canteras de la ACB. La final la perdieron porque llevaban mucho cansancio acumulado y no teníamos el potencial del resto de equipos», apunta Guillermo Tesaire, que por aquel junio de 1999 era el coordinador de la entidad colegial.
A pesar de quedarse rozando con la yema de los dedos el título, el conjunto dirigido por Chicho Lucas dejó su nombre grabado en la historia al ser el primer colegio público en llegar a una final de un campeonato estatal. «Fue un hecho histórico que debe ser recordado cada cierto tiempo. Se vive con mucha emoción porque es un hito que seguramente nunca se vuelva a repetir. De los 12 jugadores, 11 eran del colegio y todo eso le otorga todavía más mérito». Aquel grupo también destacaba por su buen hacer en lo académico. «Los chicos que sacaban malas notas no jugaban siempre, los estudios eran lo primero», explica el exdirector del colegio, Claudio García.
De ese mítico equipo que eliminó al Unicaja y al FC Barcelona, que contaba en sus filas con el reciente campeón de la NBA, Marc Gasol, solamente el internacional Rodrigo San Miguel ha llegado a la cima del baloncesto profesional. «No éramos conscientes de lo difícil que iba a ser repetirlo. Hasta el momento creo que no lo ha hecho nadie y con un colegio público es todavía más complicarlo que vuelva a suceder», admite San Miguel que todavía tiene el vídeo de la final ante el Madrid.
El futuro en el Tecnyconta
El base zaragozano está siendo protagonista en los últimos días por la opción más que firme de volver al Tecnyconta Zaragoza. «Tengo claro que quiero volver pero vamos a ver qué pasa finalmente», reconoce San Miguel acerca de su futuro.
Los 12 jugadores se llevaron un baño de masas en la que un día fue su casa. Este reencuentro sirvió para que Pablo Corbalán, Víctor Catalán, Nacho González, Pedro Miranda, Rodrigo San Miguel, Miguel Candeal, Juan Diego López, Gonzalo Arguedas, Sergio Gascón, Alberto Abenia, Miguel Gotor y Tomás Martín se volviesen a vestir de corto y anotasen unas canastas frente a un combinado formado por cadetes y júniors del Doctor Azúa.
«El Azúa siempre ha sido un colegio mítico en el balonceso aragonés y es un placer poder formar parte de esto», señala el base acerca del equipo donde comenzó sus andaduras en el baloncesto. En el partido de homenaje, donde el resultado era lo de menos, las leyendas del colegio, que recibieron un detalle conmemorativo del aniversario, demostraron que los años pasan pero que la calidad no se pierde.
