Francia ya ha cerrado la puerta al fútbol hasta septiembre. Holanda y Bélgica, también. Italia lo tiene cada vez más difícil, según ha explicado Vincenzo Spadafora, ministro de Políticas para Juventud y Deporte, quien ve cada vez mucho más complicado reanudar la Serie A. Incluso ha ido un poco más allá. "Reanudar los entrenamientos no significa reanudar el campeonato. Si no queremos tener dudas, es suficiente seguir la línea de Francia y Holanda, que han abandonado", ha dicho el político en una entrevista a la televisión italiana 'La 7'.

El gobierno italiano decidió el pasado domingo que los atletas que practiquen deportes individuales podrán entrenar a partir del próximo 4 de mayo. Y que, entretanto, los clubs de fútbol tendrán que esperar hasta el 18 de mayo, generando una fuerte tormenta mediática. "Yo honestamente veo el camino para reanudar la competición cada vez más pequeño", ha dicho Spadafora.

Plan B

"El tema de los entrenamientos es distinto, pero si fuera un presidente de un club de Serie A empezaría a pensar en la próxima temporada", ha reconocido antes de indicar que en calidad de ministro del Deporte sería un loco si discriminara el fútbol, que trae dinero a todo el sistema deportivo, pero si no se puede reanudar la competición en condiciones de seguridad, estaremos obligados a parar", ha indicado Spadafora.

En ese sentido, el ministro ha recordado que "es absurdo que tres o cuatro presidentes no lo entiendan", concluyó, mientras los clubs corren el riesgo de poder enfrentarse a responsabilidades, tanto civiles como penales, si se encontrarse un nuevo caso positivo. De ahí, que el ministro haya instado, tanto a la Liga profesional italiana como a la federación, "a pensar en un plan B", pendiente del protocolo médico que debe tomar la última decisión.

Por eso, ha dicho Spadafora que es inútil que escriban al presidente italiano Conte porque es "una presión innecesaria" ya que será una decisión colectiva de todo el gobierno, mientras los clubs se reunirán este viernes en una asamblea para debatir un escenario lleno de incertidumbres, empezando por las medidas que adoptarán con los operadores televisivos (Sky tiene la mayor participación, luego Dazn e Img, en derechos para el extranjero), quien han anunciado que no pagarán los 220 millones de euros del último plazo.

En Italia, el fútbol es el único deporte profesional que se resiste a claudicar ante la pandemia para evitar que las pérdidas económicas se disparen hasta una cifra que podría llegar a los 1.000 millones de euros. Baloncesto, rugby y voleibol ya han dado por cerrada la temporada 19-20.