Una parte de los 32.000 aficionados que han acudido hoy a San Mamés no guardaron silencio en el minuto al efecto acordado por el Athletic Club en memoria ex-concejal socialista Isaías Carrasco asesinado por ETA el pasado viernes, en Arrasate-Mondragón, por lo que el acto de homenaje se quedó en 8 segundos.

Ésta ha sido la primera vez que en San Mamés se acuerda un minuto de silencio por una víctima de ETA. El club siempre había mantenido esa potestad exclusivamente para rendir homenaje a algunos de sus miembros especialmente destacados.

Fueron fundamentalmente los aficionados del fondo norte, graderío en el que se ubica, entre otros, el grupo de seguidores cercanos a la izquierda abertzale Herri Norte, los que rompieron el silencio, aunque fueron reprobados por seguidores de otras zonas del campo.

El árbitro del partido Athletic Club-Real Valladolid, el valenciano Ángel Ayza Gámez, decidió que no se alargase y recortó el minuto a unos 8 segundos, desde que se dieron las últimas palabras por megafonía, y pitó el final del minuto.

El Athletic Club acordó ayer que se guardase un minuto de silencio "atendiendo a la recomendación de la Liga de Fútbol Profesional, ante el asesinato perpetrado" el viernes en Mondragón.

Los últimos minutos de silencio que se recuerdan en el campo bilbaíno fueron en memoria de Javier Uria, entonces presidente, y Telmo Zarraonandia "Zarra", uno de sus jugadores más emblemáticos.