El partido en Gijón ha supuesto un punto de inflexión en el aspecto emocional para la plantilla del Real Zaragoza. Ayer, Paco Montañés citó dicho encuentro en numerosas ocasiones en la rueda de prensa posterior al entrenamiento, siempre para mencionar las consecuencias positivas que ha tenido para el grupo. "El equipo ha salido reforzado anímicamente. Y el míster también. Nunca ha dejado de creer en nosotros", explicó.

El extremo se mostró convencido de que si siguen en esta línea, la afición de La Romareda apoyará a los jugadores. "Si nosotros les damos buen juego y carácter, como pasó en el último partido fuera de casa, la afición va a responder. Si la gente ve ese tipo de carácter, se engancha". Falta hace, puesto que los resultados como local están siendo el gran déficit del Zaragoza.

"Si queremos estar en plazas de ascenso directo, en La Romareda tenemos que mejorar muchísimo", admitió Montañés, para quien puede ser clave en el devenir de la temporada haber entrado en los puestos de promoción. "Anímicamente es importante. Si no te ves en puestos de playoffs, no te crees que puedes subir. Es lo que ha pasado hasta ahora", declaró. Y advirtió de que la inestabilidad en el club ha hecho más fuerte al grupo. "Estamos intentando ver todos los problemas de una manera en que hagan fuerte al equipo. Lo que hubiera estado mal es que ante las adversidades la plantilla se hubiera venido abajo, pero cada vez estamos consiguiendo tener más carácter y estar más unidos. Mirándolo de esa forma nos puede venir bien".

Por otra parte, el futbolista reconoció que ante el Alcorcón será un partido especial para él --"pasé dos años geniales allí"-- y afirmó que no sabe nada de ofertas de otros clubs. "Estoy muy centrado aquí, que bastante faena tenemos. Creo que conseguir un ascenso a Primera es un objetivo muy bonito".