A falta de dos jornadas para la conclusión, el Monzalbarba se convirtió ayer en el primer equipo que descenderá de categoría. En un partido muy disputado en el que los locales protestaron mucho la actuación del trío arbitral, el Huesca consiguió una victoria que le permite seguir luchando por la posibilidad del ascenso, mientras que condena automáticamente al Monzalbarba a jugar la próxima temporada en Regional Preferente.

El principio fue un monólogo del Huesca, que tuvo dos buenas ocasiones nada más comenzar. El Monzalbarba reaccionó y marcó, pero cuando todos estaban casi en el centro del campo el árbitro anuló el tanto. El Huesca se creció y marcó dos tantos, pero el Monzalbarba no se rindió y a falta de cinco minutos para el descanso logró reducir la desventaja con un gol de Ortega.

En la segunda parte hubo polémica con un claro penalti que el colegiado no pitó, pero el linier levantó el banderín y todo el mundo pensó que lo iba a señalar, pero quería indicar al árbitro que alguien la había agarrado por detrás. El encuentro estuvo parado diez minutos sin que llegara a pasar nada grave. Al final los locales perdieron el partido y la categoría.