A las 9.00 horas de esta mañana está citado José María Movilla en la Policlínica situada en el Vicente Calderón para empezar la pretemporada junto a sus compañeros en el Atlético. Es muy probable que el centrocampista no finalice el verano vestido con esa camiseta y que su fútbol acabe en La Romareda o en cualquier otro destino --Mallorca o la Premier League--, pero hoy el Movi vuelve a la disciplina del conjunto rojiblanco a la espera de que se concrete su futuro.

El Zaragoza retomará durante esta semana las conversaciones con Movilla para intentar un fichaje que se sigue viendo muy difícil. Las enormes diferencias entre lo ofrecido por la entidad y lo demandado por el futbolista han hecho que no exista una negociación propiamente dicha, pero ni uno ni otro lado dan por roto el asunto.

Eso sí, desde el Zaragoza se habla de "máximo esfuerzo" al referirse a la oferta de 5,5 millones de euros brutos más incentivos por cuatro años y los agentes del jugador ya han manifestado que no habrá negociación hasta que el ofrecimiento se acerque a sus pretensiones, que rondan ese montante económico por los mismos años, pero en neto y sin objetivos. Así, la alternativa del madridista Celades va ganando enteros conforme pasan los días, ya que su fichaje no implicaría un desembolso tan excesivo y el Real Madrid facilitará su salida.

POSICIONES ALEJADAS Pero, de momento, el Zaragoza tiene al Pelado como su objetivo prioritario, porque así lo demanda el propio técnico, Víctor Muñoz, aunque sus deseos pueden no verse cumplidos. El club ya ha echado el resto en su primera propuesta al futbolista y también ha dejado claro que no quiere que el asunto, para mal o para bien, se alargue demasiado, por lo que esta semana se plantea como decisiva para saber si Movilla seguirá vistiendo la camiseta zaragocista.

Y, una vez convencido al jugador, aún quedaría cerrar el acuerdo con el Atlético, con el que le resta un año de contrato y otro opcional. En el Zaragoza hay convencimiento de que esa segunda parte del proceso no tendrá demasiadas dificultades, ya que la entidad rojiblanca ha dejado entrever su predisposición a escuchar ofertas y la deuda que tiene con el futbolista puede ser clave.

Sin embargo, lo inmediato es que Movilla pasará hoy el reconocimiento médico y se someterá a tres días de pruebas físicas antes de que el 1 de julio dé comienzo la concentración de pretemporada en Los Angeles de San Rafael, ya que el 17 de julio el Atlético inicia su participación en la Intertoto, aunque es muy posible que el futbolista no llegue a disputar ese torneo. Desde luego, el deseo del Zaragoza es cerrar la negociación mucho antes de ese día. Pero ahora mismo no hay demasiados datos que inviten al optimismo.