Es muy difícil definir a Nemanja Radovic. Imposible encasillarlo. Un cuatro que no tira de tres pero que puede hacer 3/3 desde el 6,75 jugando de cinco. Un jugador que defiende, rebotea, anota. Que hace de todo y casi todo bien. Un estajanovista siempre dispuesto para la batalla. Su rendimiento y su carisma ya le hicieron dejar huella en Murcia y Santiago de Compostela y, en temporada y media, la está dejando en Zaragoza también. Con la camiseta del Casademont ha batido sus mejores marcas en la ACB, donde lleva jugando desde el 2013. Las últimas, los 29 puntos y 32 créditos de valoración en Badalona que, además, le han valido para ser el MVP de la jornada.

La pasada no participó en la victoria ante el Gran Canaria. Una torcedura de tobillo en el último entrenamiento de la semana le hizo ser baja en el encuentro de Liga pero su recuperación ha sido asombrosa. En Dijon quedó algo tapado por los siete triples y 32 puntos de Benzing, pero Radovic ya firmó en la Borgoña un partido soberbio con 18 puntos y un espectacular 9/11 en tiros de dos, 3 rebotes, 3 asistencias y 22 de valoración. En Badalona dio un paso más con 10/13 en tiros de dos y un sorprendente 3/3 en triples a los que añadió 8 rebotes para 32 créditos de valoración. Lo mejor de todo es que Radovic ha jugado estos dos partidos fuera de su posición natural, en el cinco.

Los problemas en el menisco de Justiz, que le tienen más cerca del quirófano que de otra cosa, más las molestias que arrastra Fran Vázquez y que obligan al cuerpo técnico a dosificar muy bien sus esfuerzos, han movido las piezas del equipo. El montenegrino ha ido al cinco, Benzing ha regresado al cuatro y los exteriores se reparten los minutos en el perímetro. La movilidad de Radovic, tan pronto debajo del aro como en la línea de tres, le permitió sumar tantos puntos y, al equipo, tener más argumentos para ganar. De la necesidad, el Casademont ha hecho virtud. «Ambos entrenadores tenemos lesionados y jugamos nuestras piezas lo mejor que podemos. La defensa de los bases ha sido muy buena y Radovic ha estado muy bien en el bloqueo directo y abriendo bien el campo con los lanzamientos que ha tenido», señaló Fisac.

Un jugador contracultural

Ahí ha brillado Nemanja Radovic que, por encima de etiquetas, es, ante todo, un jugador de equipo. Bajo su aspecto hipster se esconde un jugador de toda la vida, contracultural, capaz de hacerse imprescindible en sus equipos sin destacar en el tiro de tres, santo y seña del baloncesto moderno. Un jugador que siempre suma y al que rara vez alumbran los focos. En sus 205 partidos en la ACB solo había sido MVP una vez, la campaña 2017-18 tras un Obradoiro-Tenerife en el que hizo 17 puntos, 12 rebotes y 29 de valoración. Con el Casademont ha establecido sus mejores registros en la competición porque con los 29 puntos de Badalona mejora los 22 que sumó ante el Estudiantes esta misma temporada y con los 32 de valoración supera los 31 que firmó contra el Obradoiro, también este mismo curso. Por si fuera poco, los tres triples que anotó son también su mejor registr, algo que había logrado en un Obradoiro-Valencia de la temporada 17-18 (aunque ese día fueron 3/4). Además, contra el Real Madrid capturó 14 rebotes, su tope en este apartado. Contra el Baskonia, la pasada temporada, logró tres recuperaciones, su cifra máxima.

Para el Basket Zaragoza es el segundo galardón individual de la temporada tras el que obtuvo DJ Seeley en la quinta jornada con 30 de valoración. Llama la atención que el tercer clasificado de la Liga Endesa, con 14 victorias a cuestas después de 19 jornadas, no tenga a ningún jugador entre los mejores, a ninguno destacado en los diferentes rankings de la ACB. Solo dos MVPs y alguna aparición esporádica en el quinteto de cada jornada que recoge ahora a los mejores en cada apartado estadístico. La explicación es sencilla, la fuerza del Casademont es el colectivo. Es el esfuerzo en defensa, es el trabajo por encontrar al mejor cada momento. Y ese puede ser cualquiera.

Esta vez ha sido Radovic, que se suma así a una lista que incluye a Paolo Quinteros (2), David Barlow, Rafael Hettsheimeir (2), Bracey Wright, Henk Norel, Tomás Bellas, Stevan Jelovac, Gary Neal (4), Nikola Dragovic, Bo McCalebb, Stan Okoye (2) y Nacho Martín. Trece jugadores diferentes se han llevado el MVP de una jornada en estas diez temporadas del club en la Liga ACB.