Rafael Nadal iniciará hoy la defensa de su título en el Abierto de los Estados Unidos, enfrentándose a David Ferrer. Será un estreno exigente para el mallorquín, número uno mundial, que después de su victoria hace 15 días en Toronto, donde levantó su quinto título de la temporada, afrontará con excelentes sensaciones la cita en Flushing Meadows. «Evidentemente nos conocemos mucho los dos y aparte de todo es un buen amigo. Será un encuentro muy especial, importante para ambos», dijo el mallorquín que, en el 2017, venció en la final a Kevin Anderson. También lo será para el jugador alicantino, profesional desde el 2000, que ya ha anunciado que será su última aparición en Nueva York y posiblemente en un Grand Slam, razón por la que la organización ha programado el encuentro en la central y en horario principal.

Los nombres de Roger Federer y Novak Djokovic, los dos otros ganadores de Grand Slam esta temporada, en el Abierto de Australia y en Wimbledon, respectivamente, vuelven a presentarse como las mayores amenazas para Nadal en la defensa de su corona en el torneo neyorquino, que celebra su 50 aniversario, y estrenará una nueva instalación, el nuevo Louis Armstrong Stadium, una instalación para 14.000 espectadores que permitirá también encuentros nocturnos.

Esta cita también supone el regreso a un Grand Slam del escocés Andy Murray, la cuarta parte del Big 4, que ha monopolizado el mundo del tenis en la última década. Desde el 2005, entre Federer (20), Nadal (17), Djokovic (13) y Murray (3) acumulan 49 de los 54 torneos del Grand Slam que se han jugado. Los últimos dos títulos levantados por un jugador que no forme parte del Big 4 fueron el Abierto de Estados Unidos en el 2016 y Roland Garros 2015, ambos por el suizo Stan Wawrinka.

En el cuadro femenino, Garbiñe Muguruza, actual 12º del mundo, abrirá hoy también la primera ronda contra contra la china Shuai Zang.