Sabido era que el Real Zaragoza busca en los últimos días del mercado estival un central. Las dudas generadas por Jesús Valentín, que está lejos del nivel ofrecido en el Huesca y en el tramo final dela campaña pasada; los errores de Verdasca fruto de su bisoñez; y la juventud de Zalaya, al cual apenas se le han concedido oportunidades, dejan a Grippo como el único fiable. Y cogido con pinzas. Hasta ayer, nadie del club había dejado claro que se necesita un nuevo central. No era la idea hace unas semanas, pero ahora la dirección deportiva y el técnico consideran su incorporación como prioritaria.

«Quizá sí que podemos necesitar gente que nos dé un poco más de consistencia y experiencia, tener más posibilidades como pretendíamos desde un comienzo. Quizá nos falta un poco de poso, no de calidad ni potencial, pero sí asentamiento o experiencia», dijo Natxo González. No lo quiso afirmar tajantemente, pero sí que reconoció la necesidad de otro central más experimentado. De todos modos, el técnico quiso descargar de responsabilidad a sus zagueros al recalcar que es una situación «que se genera», pero que «no me preocupa ya que hay gente con un gran potencial y joven».

A Jesús Valentín, principal responsable del tanto del Tenerife (aunque no el único), no quiso «señalarle ni crucificarle porque no es justo». «El fútbol es un juego de errores y en la jugada hay mucha historia. No voy a responsabilizar a nadie porque es totalmente injusto. Valentín es un chico con muchísimo potencial y nos va a dar grandes tardes», sentenció el vitoriano.

Aún así, Natxo González reconoció que «da rabia recibir el gol a balón a parado y de cualquier otra manera». «Parece que una situación tan fácil, entre comillas, como es un marcaje individual.Nos duele», agregó.

EL PROCESO

Más de una decena de veces habló el entrenador blanquillo del «proceso». Entiéndase, explicado por él mismo, como «esa fase que lleva a los resultados positivos». El camino hasta alcanzarlos. Partiendo de la base de que «los resultados son necesarios siempre», Natxo González está «contento». «Está saliendo todo según lo previsto y en ese proceso hay una derrota en Tenerife y en Morata teníamos unos objetivos claros que se cumplieron independientemente del resultado. Estoy satisfecho con la progresión que estamos llevando», explicó. De todos modos, reconoció que su esquema táctico y su modo de jugar requiere tiempo para asimilarlo: «Hay diferentes tipos de fútbol, todos muy respetables. En mi trayectoria he visto que cuesta porque hay que manejar muchas sitauciones y variantes. Es enriquecedor, pero cuesta», aseveró el entrenador.

Por eso, todavía queda trabajo por hacer y «muchos conceptos que dominar defensivamente como las ayudas, coberturas o basculaciones». «Dentro de ese proceso somos un equipo diésel que trabaja para ser en el futuro un equipo rápido a nivel físico y mental», subrayó.

Hasta mañana en el debut liguero en La Romareda no se sabrá qué versión ofrece el Real Zaragoza, pero sí que Natxo González reconoció que están «ilusionados con este partido», por ser el primero de la campaña en casa. Comenzar con buen pie ayudaría a acercarse al objetivo que expuso el vitoriano en su presentación, «que la gente esté orgullosa». «Trabajamos al máximo para contentar a tanta gente que tenemos por detrás, como se vio en Morata o en la ofrenda en El Pilar. El objetivo es que salga la gente de la Romareda diciendo: ‘Esto tiene buena pinta’», remarcó el técnico. Sin nuevo central, pero con ilusión, ya llega el primer partido en casa.