Porfirio Fisac siempre tiene claro el mensaje. Es diáfano y claro en sus exposiciones. Lo primero después de ganar al Fuenlabrada fue felicitar a su equipo y dar por hecha la clasificación para la Copa del Rey. "Lo primero que quiero hacer es felicitar a mis jugadores por el trabajo que están haciendo en la primera vuelta. Hay que seguir empujando, consiguiendo logros y marcándote nuevos retos. Las cosas hasta que no son matemáticas no están ahí pero quiero felicitarles. Es un objetivo no previsto pero nunca nadie en la ACB se ha quedado fuera de la Copa con 10 victorias y nosotros tampoco vamos a quedarnos fuera, os lo aseguro", señaló el segoviano.

Lo segundo que hizo, antes de las preguntas, incluso de resumir el partido, fue pedir más a la afición. Fisac siempre dice que el equipo debe ser transmisor de energía hacia la grada, pero ahora reclama un paso más del público. "Lo segundo que quiero es decirle a mi afición que la quiero siempre conmigo, que necesito que me sientan, que no me dejen solo en ciertos momentos porque la liga va a ser difícil y tenemos que estar empujando en los buenos y en los malos momentos, siempre juntos. Quiero que sientan el carácter de su entrenador y me encanta que nos vean y estén felices con nosotros. Pero necesito que estén y empujen más; es una filosofía que quiero y necesito".

El técnico del Casademont desgranó después el partido y las dificultades del mismo. "Era un partido muy difícil de sacar por su ritmo y forma de jugar en estos momentos, porque paran el ritmo y juegan un baloncesto diferente. Por eso ha sido un partido difícil, de trabajo, de los de pico y pala y de los que si te entregas un mínimo momento, ellos te ganan. Hemos solventado un compromiso muy difícil", aseguró. Para el técnico, lo importante es que su equipo lanzó mucho de tres, más de lo habitual, aunque no tuviera acierto. "Lo que más me agrada es que hoy es el día en el que hemos tirado más. Tenemos el reto de ser solventes en lanzamiento y anotación, pero me gusta que lleguemos a este número de lanzamientos. No os preocupéis por el porcentaje porque subirá según qué días y que depende de situaciones como el cansancio. Hemos encontrado muchos tiros liberados y eso es lo más importante, que las sigamos creando".

Pero los éxitos conseguidos hasta la fecha no frenan al Casademont ni a su entrenador. Fisac ya piensa en nuevos retos y en seguir haciendo historia. "Mi reto son las doce victorias. Nunca lo he hecho en la primera vuelta y para mí sería un reto sumarlas en la primera vuelta; me sentiría muy orgulloso. Será difícil, pero ahora en la Liga Endesa nos estamos jugando el siguiente reto en cada partido. Ese siguiente reto, que puede estar aún muy lejos, debemos de ser consciente de que se empieza a jugar el próximo sábado en Málaga y en los siguientes. No podemos perder el sentimiento de querer crecer; no quiero que nadie se acomode. El que se acomode no va a jugar, sea quien sea".

Lo más inmediato es la Champions League, donde el Casademont ya no puede fallar en casa. "Tenemos una necesidad muy importante. Hemos perdido dos veces con un equipo y tal y como está el grupo de igualado, va a haber que ganar algún partido fuera de casa. Sin embargo, lo más importante ahora es ganar todos los partidos como local porque cualquiera que pierdas, puede hacer que te quedes fuera. Besiktas es de esos equipos con currículum, con gran entrenador, gran rotación... Y era previsiblemente el líder de este grupo", concluyó Fisac.