Algo más que un clásico europeo, algo más que un partido entre dos equipos que suman 16 títulos de la máxima competición continental. Bayern y Madrid vuelven a medir sus fuerzas tras la humillación del 0-4 del 2014 en aquella semifinal con Ancelotti en el banquillo blanco, el último partido que perdió el cuadro alemán en casa en Champions. Enfrente aparece un equipo cargado de dudas, con un técnico hipotecado por una BBC obligada a mostrar su mejor cara en el arranque de los cuartos de final si no quiere quedar seriamente marcada. «Estos partidos no le asustan a la BBC, le molan», dice Zidane, que tendrá en Raúl un apoyo moral.

El escaparate de la Champions vuelve a nutrirse de nombres a los que se le exige una respuesta en una cita como la del Allianz Arena, donde el Bayern quiere resolver cuentas pendientes con el Madrid. El equipo de Zidane, que lleva 13 años sin caer en cuartos, se ampara en los 52 partidos seguidos que lleva marcando para no irse de vacío.

«No hay ánimo de venganza, solo de poder jugar un buen fútbol y ganar», afirma Ancelotti antes de un choque que viene marcado por los nombres más relevantes en ambos equipos. El primero, Lewandowski, que se ejercitó ayer mientras la prensa contemplaba la sesión para, posteriormente, abandonarla por su problema en un hombro. «Se entrenó solo 20 minutos. Lo probaremos antes del partido. Si no tiene dolores, jugará, si persisten no lo hará», afirmó Ancelotti. Más clara parece la presencia de Neuer en la portería tras ser operado en el pie izquierdo el pasado 30 de marzo. El que no estará será el central Hummels, lesionado en el tobillo, por lo que deja su puesto a Boateng. Enfrente, el Madrid también presenta una defensa menguada por las lesiones de Pepe y Varane, con lo que todo queda para Ramos y Nacho.

No es el caso de la BBC, que tiene otro examen en este partido tras depreciarse en los últimos encuentros. «Son muy buenos, pero cuanto más bueno eres, más criticado», sostiene Zidane, al que su amigo Carletto no tiene ninguna intención de quitarle la razón. «Prefiero a Cristiano en el banquillo, a Benzema en la grada y a Bale, en casa», señaló el técnico italiano.

Con respecto a la situación del su delantero estrella, Robert Lewandowski, con problemas en el hombro derecho, Ancelotti dijo que será esta tarde cuando decidirá sobre su participación en el partido. «Si está bien jugará, si no está bien no jugará», dijo. «Tal vez el Madrid sea un poco más favorito que nosotros, porque es el campeón de la Champions, pero tenemos confianza, hemos venido haciendo las cosas bien y vamos a tratarr de mandar en el partido como lo hemos hecho siempre», aseguró Arturo Vidal en rueda de prensa.