El Giro sigue aliado con las caídas, con parte de sus favoritos ya en casa tras pasar por el quirófano, como Purito Rodríguez. Ayer, de nuevo, en el último kilómetro, con demasiadas curvas y mucho peligro, buena parte de los velocistas se fueron al suelo o chocaron contra las vallas. Venció el francés Nacer Bouhanni, que sumó su tercera victoria personal en la prueba.

Cadel Evans se mantiene al frente de la general, con firmeza y fortaleza, pese a los 37 años. El australiano espera la contrarreloj de mañana para ampliar diferencias, tras la jornada por la costa del mar Tirreno, con llegada a Savona tras superar el típico puerto final de segunda. La crono será el obstáculo que antecede a la primera gran cita con la montaña de verdad, con llegada el sábado a Oropa, y el domingo, si la nieve lo permite, en los Dolomitas.