Bélgica ha tardado medio siglo en encontrar por fin un relevo al ciclista de los ciclistas. Un nuevo caníbal, que podría ser por edad el nieto de Eddy Merckx, se presentó ayer ante la sociedad ciclista. Y lo hizo frente a la playa de la Concha. Remco Evenepoel, el fenómeno; un alumno más que aventajado en la nueva escuela de talentos mundiales, ganó la Clásica de San Sebastián, la Klasikoa. Y lo hizo a la grande, ante los mejores campeones, como Alejandro Valverde, que casi podría ser, con 20 años más, su padre. Y lo hizo en solitario. Y lo hizo atacando. Y lo hizo para que muchos recuerden que la tarde del 3 de agosto del 2019 un chaval de 19 años destrozó a todo un pelotón que llegaba a las carreteras de Euskadi después de tres semanas de combate por la ruta del Tour. Evenepoel estuvo en la cantera del PSV hasta que cambió el balón por la bicicleta.