Desde el club nos han dicho que hay que aplicar el sentido común, pero está claro que o aceptas las normas o te vas de La Romareda", afirmaba ayer uno de los componentes de los grupos ultras que se reunieron con el Zaragoza para debatir sobre las medidas que han decidido activar el Consejo Superior de Deportes (CSD) y la Liga de Fútbol Profesional (LFP) con el objetivo de erradicar la violencia en el fútbol dentro y fuera de los estadios. En esa reunión participaron miembros del Ligallo Fondo Norte, el Avispero, Leyales y el Colectivo 1932. También, además de los componentes de los grupos ultras, hubo una representación de la Federación de Peñas del Zaragoza. Por parte de la entidad zaragocista estuvieron el consejero Fernando Sainz de Varanda y el secretario general Francisco Checa. Y completaron la reunión el coordinador de Seguridad Ciudadana y el jefe de seguridad del club aragonés.

Tras la reunión de casi dos horas de duración mantenida entre todas esas partes, el Real Zaragoza emitió un comunicado en el que se indicaba: "En el encuentro se ha analizado la situación creada en el fútbol español tras los graves incidentes ocurridos en los últimos días". Y se añadía: "El club ha explicado su voluntad inequívoca de que se respeten las normas de convivencia y respeto, al tiempo que ha expuesto que no se permitirán actitudes, gestos o cánticos que puedan fomentar la violencia física y verbal. Esta exigencia no se circunscribe únicamente al ámbito de los participantes en la reunión, sino que se hace extensivo a todos los aficionados".

Según la versión facilitada por el Zaragoza, "todos los participantes en la reunión han puesto de manifiesto su voluntad de colaborar y conducirse por la línea que ya se encuentra marcada en el Reglamento de régimen interior del Real Zaragoza". Lo que ratificaba un seguidor de uno de los grupos ultras. "Tenemos que remar todos juntos por el bien del Real Zaragoza. Tendremos que moderar algunos cánticos y evitar las peleas y los insultos", comentaba. Mientras que desde el club se añadía que "hay que aplicar la normativa con todo rigor, no queda otra. Nosotros hemos visto receptivos a los componentes de estos grupos, pero las normas son iguales para todos los aficionados".

El Real Zaragoza tiene previsto publicar en su página web antes del partido de este domingo contra el Girona todas las normas que se deben cumplir para asistir a los partidos que se disputen en el estadio de La Romareda "como recordatorio para todos los aficionados". Fuentes del club aragonés también comentaron ayer que los miembros de la seguridad privada contratados por la entidad son los encargados de velar por la seguridad tanto fuera como dentro del estadio. Algunos seguidores, por ejemplo, han puesto problemas cuando han sido requeridos para ser cacheados.

REUNIÓN EN MADRID

El coordinador de Seguridad Ciudadana de La Romareda y el jefe de seguridad del club aragonés acudirán hoy a Madrid para participar en una reunión que hay programada para repasar todas las medidas que se van a activar de inmediato para tratar de erradicar la violencia en el fútbol dentro y fuera de los estadios. Todo esto se ha precipitado tras el asesinato de un hincha del Deportivo el pasado 30 de noviembre en las horas previas al partido disputado por el equipo gallego contra el Atlético de Madrid en el estadio Vicente Calderón. Los ultras de ambos clubs quedaron para pelearse y los altercados acabaron con un muerto. El club colchonero ya ha expulsado del Calderón a los componentes del Frente Atlético, mientras que el Deportivo ha clausurado por dos partidos la zona donde se suelen ubicar los Riazor Blues.

Los clubs que sean permisivos con los grupos violentos bajarán de categoría o perderán puntos o tendrán que cerrar parcialmente sus estadios. Así lo acordaron el Consejo Superior de Deportes, la Liga de Fútbol Profesional y la Federación Española de Fútbol en una reunión que mantuvieron recientemente. Estas medidas entrarán en vigor a partir del 15 de diciembre.