Ilusionados, optimistas, soñadores y hasta utópicos, Sergio Durban y Juanma Giménez Múgica, vinculados a las canteras de Corazonistas y Maristas, quieren devolver al balonmano zaragozano a la Asobal tras las experiencias del Iberia, Ademar Maristas, Helios, Garbel Zaragoza y Balonmano Aragón. Su proyecto es unir a las escuelas y clubs zaragozanos desde abajo hasta arriba y alimentándose de jugadores de cantera. Para ellos el secreto es el trabajo, el esfuerzo y la ilusión más que el apoyo económico.

Este era el momento más oportuno. "Hace tiempo que no se hacía nada y había que romper la dinámica. Con el trampolín de la plaza del equipo de Primera de Maristas iniciamos una carrera ilusionante. No es una fusión de clubs y Ademar Maristas y Adecor siguen su camino. Es un proyecto para toda la ciudad y construir algo para todos y cuyo fin último es un equipo en la máxima categoría lo antes posible y que esté formado por los mejores jugadores de Zaragoza. Apuntamos alto y el punto y final es la Asobal", afirma Giménez.

Ha influido el cambio de la filosofía en ambos colegios zaragozanos. "Ahora los equipos federados son independientes del colegio y este no se hace cargo más que de los escolares. Ambos estamos en la misma situación y había que buscar financiación para los equipos más deficitarios", dice Giménez. Ahora Ademar tiene cinco equipos federados y Adecor, cuatro.

El nuevo conjunto denominado Balonmano Zaragoza Ademar se alimentará al cien por cien la próxima temporada de los equipos de Balonmano Zaragoza Adecor y Ademar Maristas desde juvenil. Pero se quiere contar con todo el balonmano zaragozano. "Ya hemos hablado con Stadium, Moncayo, Utebo y la Vieja Guardia. No queremos quitar ningún jugador a las canteras y respetar a todas", explica Giménez.

Zaragoza cuenta con gran tradición y afición por el balonmano. "He mamado mucho de Alfonso Mateo en Corazonistas. Era un libro de sabiduría del balonmano y un punto base era su espíritu conciliador. Este proyecto apuesta por el bien común de la ciudad sin perder la entidad de las escuelas", apunta Durban.

El proyecto es para que en cuatro o cinco años Zaragoza vuelva a la Asobal. "Podríamos comprar la plaza de Asobal, pero no tenemos dinero. Lo hacemos de pobres, pasito a pasito. El año que viene podemos optar a la fase de ascenso a la División Plata y el año siguiente construir un equipo para subir a la segunda categoría nacional", dice Durban.

Para Giménez y Durban la Asobal no es inaccesible. Con el poderío del FC Barcelona la categoría ha perdido nivel deportivo y las estrellas emigran al extranjero. "El último año del Balonmano Aragón en Asobal había mucha gente de casa como Camas, Postigo, Castro, Gómez, Val, Del Valle, Millán, Ariño, Sorli, Egea... Ahora podemos generar jugadores suficientemente buenos para tirar de este proyecto. Los jóvenes se ven fuera de Primera y queremos que no se vayan fuera de Aragon", dice Giménez.

Desde ahora tendrán que trabajar para encontrar nuevos patrocinadores. Esperan empezar la pretemporada a finales de agosto y la temporada de Primera arranca el primer fin de semana de octubre. Ya tienen decidido el color del uniforme. "Será el blanco y azul, los colores de Zaragoza", concluye Durban.