El Olivar puso ayer en marcha su iniciativa de visitas guiadas para dar a conocer la marcha de sus grandiosas obras de renovación. Este plan estratégico, iniciado el pasado año con motivo del 50 aniversario del club, va a suponer un cambio profundo en las instalaciones, que van a dar un paso definitivo hacia la modernidad. Supone un gran esfuerzo para el Estadio Miralbueno, con una inversión de más de 8 millones de euros, pero ya se intuye lo que será y ofrece una estupenda impresión.

A falta de un año para que se puedan presentar todas las instalaciones, el aspecto es imponente en los 70.000 metros cuadrados de actuación, donde se incluyen 26.000 de pistas deportivas exteriores; 35.000 de urbanización, aparcamiento, viarios, espacios verdes y parque infantil; 6.000 para uso de pabellón polideportivo, frontón cubierto y graderíos; y 3.000 de nuevas edificaciones, comprendiendo un edifico administrativo, control de accesos y sección de tenis, rincón de la amistad, vivienda y centro social... Es decir, una transformación aguda que tuvo a César Láinez como cicerone. El exguardameta del Real Zaragoza dirigió un paseo paseo por las obras, que servirán para aglutinar todas las zonas de un club que, además, ofrecerá 320 nuevas plazas de aparcamiento junto al nuevo acceso al recinto.

El cambio en la fisonomía de todas las infraestructuras deportivas pasará a convertir a El Olivar en uno de los clubs polideportivos más importantes de España. Por algo va a ser el mayor desembolso económico realizado en una sola instalación deportiva en Aragón desde la construcción del Príncipe Felipe en 1990. Se percibe en el espacio para los dos campos de césped artificial de fútbol 11, en el de fútbol 7, en las ocho pistas de tenis (cinco de tierra batida), las cuatro de pádel (dos de ellas cubiertas), en el parque infantil, en el pabellón polideportivo, en los frontones (uno de ellos cubierto), en los vestuarios...

La remodelación supondrá una modificación completa de sus infraestructuras, con un profundo cambio de cara que ya se empieza a apreciar y que sus socios podrán comprobar desde junio. El Olivar va a poner a disposición de todas aquellas personas, asociaciones y grupos sociales que deseen ver el progreso del Plan Estratégico visitas guiadas en dos turnos de sábado.

El atractivo de las instalaciones debe servir no solo para el crecimiento social sino también deportivo. Se quiere progresar no solo en cantidad sino también en calidad, como bien muestra el impacto que genera la proyección de sus nuevas instalaciones.