Han pasado 18 años desde que coincidieron por última vez dos zaragozanos en la selección absoluta, así que ni Carlos Alocén ni Rodrigo San Miguel dudan al calificar qué supone para ellos haberse encontrado con España. «Es un orgullo muy grande para Zaragoza y para todo Aragón», coinciden los dos desde Guadalajara, donde trabajan a las órdenes de Sergio Scariolo para preparar los partidos ante Letonia, mañana, y contra Turquía, el lunes.

Rodrigo y Carlos son dos bases zaragozanos. Hasta ahí las coincidencias. San Miguel tiene 34 años y vive una esplendorosa madurez profesional en el Iberostar Tenerife tras una amplia y sólida carrera en diferentes clubs de la ACB tras sus comienzos en el recién nacido CAI Zaragoza. Alocén acaba de cumplir los 18 y ha irrumpido en la Liga Endesa con el descaro de su edad y un talento descomunal. «Nos llevamos quince años, casi dieciséis. Él está empezando su carrera profesional, viene de hacer una grandísima temporada y esto es un premio muy bueno a ese trabajo que ha hecho este tiempo. La FEB siempre da algún premio a gente joven para meterlos un poco en dinámica y han pensado en Carlos y me parece perfecto porque va a a ser un jugador que va a estar durante muchos muchos años en la selección e ir metiéndolo en dinámica es muy positivo», valora el veterano.

«Los primeros entrenamientos han ido muy bien, el grupo me ha acogido muy bien, ya me avisaron de ello, y estamos entrenando al máximo. Scariolo me dijo que jugara como yo sé, que no me cortara y sobre todo que jugara con libertad y me lo pasara bien», señala el debutante. Compañeros de puesto, zaragozanos, veterano y novel. San Miguel le ha tendido la mano y Alocén quiere aprender todo lo que pueda. «Hasta el momento le he ido observando y creo que no necesita muchos consejos. Solo le dije que estuviera tranquilo, que no se preocupara por nada y que cualquier duda que tuviera a nivel de sistemas o jugadas me lo preguntara. Él está haciendo su baloncesto con desparpajo y tiene baloncesto de sobra para estar aquí. No necesita mucha ayuda», dice San Miguel.

El jugador del Tenerife ha visto muy integrado al del Tecnyconta. «Está como uno más, lo veo muy bien. De hecho sorprende su desparpajo. Es verdad que cuando estamos en grupo está un poco más callado, supongo que viendo cómo funciona todo, conociéndonos a todos, pero en el campo juega con mucho desparpajo, como si llevara mucho tiempo con nosotros. Eso es lo que lo hace especial. Eso es algo muy positivo que seguro que le va a dar muchos éxitos en el futuro», augura San Miguel.

«Es un orgullo coincidir con él. me ha dicho que disfrute, que me iban a acoger genial. El ambiente es súper bueno aquí dentro. Me ha dicho sobre todo que disfrute la experiencia, que hay muy pocas como esta», explica Alocén. «Jugamos en la misma posición pero creo que tenemos perfiles un poco diferentes. Voy a aprovechar al máximo tenerlo al lado e ir metiendo cosas en mi juego que él tiene muy buenas y que me quedan por aprender», añade el base.

«Somos un poco diferentes. Él es grande, más largo que yo, ocupa más espacio, igual él es un poco mas creativo y yo un poquito más cerebral. También la edad te da eso, tienes un poco más de poso por los años que llevas jugando. Los dos somos más penetradores que tiradores pero también creo que eso Carlos lo va a ir mejorando y creo que va a ser un jugador súper completo», explica San Miguel. Y la terna de bases la remata Quino Colom, que no es zaragozano pero sí tiene pasado en Zaragoza. «En los bases no puede haber más presencia de Zaragoza. Quino es medio maño porque estuvo cuando era joven y guarda un buen recuerdo», añade Rodrigo. Zaragoza lleva el mando.