Pablo Abián se despidió del Mundial de bádminton que se disputa en la ciudad oriental china de Nankín al perder en tres sets contra el indio Kidambi Srikanth, quinto cabeza de serie, quien se impuso por 21-15, 12-21 y 21-14 en un partido que duró 62 minutos. El aragonés, de 33 años y número 48 del ránking mundial, empezó el encuentro perdiendo el primer set, consiguió recuperarse en la segunda manga pero finalmente claudicó en el tercero ante el indio -sexto del mundo, de 25 años- que se medirá en octavos con la raqueta del malasio Daren Liew, de 30 años y número 38 del mundo.

Abián había debutado en el torneo con una victoria por la vía rápida ante el inglés Toby Penty (21-18, 21-6) y esperaba batir a su rival, que venía de derrotar en primera ronda al irlandés Nhat Nguyen por 21-15 y 21-16. La derrota del bilbilitano se unió a la del toledano Luis Enrique Peñalver, 115º en el ránking mundial, que también cayó en segunda ronda ante el indio Bhamidipati Sai Praneeth (16º), lo que dejó el cuadro masculino sin representación española. Peñalver, de 22 años, plantó cara al indio en el primer set, que se resolvió con un ajustado 21-18, pero en el segundo el jugador indio de 25 años, que atraviesa el mejor momento de forma de su carrera, impuso su calidad y asestó un más holgado 21-11 al castellanomanchego.

En el cuadro femenino, la campeona olímpica Carolina Marín venció en dos sets a la tailandesa Busanan Ongbamrungphan y se enfrentará en octavos a la japonesa Sakaya Sato, número 17 del mundo, con el objetivo de seguir pasando fases en la competición y proclamarse campeona como lo hizo en 2014 y 2015. Marín es la única representante española que queda en el torneo.

Pablo Abián llegaba a la cita de China con la ilusión de alcanzar la ronda más lejana posible. El bilbilitano ha conquistado este mismo año el oro en los Juegos del Mediterráneo que se celebraron en Tarragona y posee el mejor palmarés de un volantista español. Ha sido 17 veces campeón de España, once de manera individual y seis en dobles, además de ser olímpico. En los mundiales su cota más alta habían sido los octavos de final, ronda que ha alcanzado en dos ocasiones. En China cayó una eliminatoria antes, en dieciseisavos, ante un poderoso rival.