«Desde mi llegada no ha habido lesiones serias, excepto la de Papu, que ha estado conmigo una hora y media y ya no lo he visto más», aseguró con una sonrisa Víctor Fernández, que en su debut vio al georgiano marcar un golazo en el triunfo ante el Extremadura y que después por lesión apenas ha contado con él (4 partidos y 137 minutos en total). Desde el 4 de marzo está en Tblisi, con el médico de la selección de Georgia, Merab Vardudzkashvili, y lo previsto es que llegue entre hoy y mañana a Zaragoza casi recuperado del edema óseo en el tobillo izquierdo. Si es así, no estaría descartado ante el Nástic el lunes 1 de abril.