El Real Zaragoza-Tenerife se jugará el lunes 3 de noviembre a las 21.00 horas por la huelga convocada por los trabajadores del club por la falta de acuerdo en el ERE anunciado por la entidad y que tiene previsto rescindir 210 contratos de los 292 que existen entre el Zaragoza y la Fundación. El aplazamiento un día del encuentro, fijado para el domingo a las 18.00 horas, era una posibilidad latente desde el inicio, pero el club no la ejecutó hasta que en la reunión con el comité de empresa del miércoles la falta de sintonía fue absoluta. Hoy los representantes del club y del comité tienen cita en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje a las 9.30. Sin embargo, poco o nada se puede esperar de ese cónclave. De hecho, desde el club se entendió desde el principio que la huelga era una ruptura de la negociación y no se puede descartar que hoy no acuda ningún representante de la SAD al SAMA

La Federación Española, "vistas las circunstancias excepcionales" autorizó ayer por la tarde el retraso del partido al lunes, aunque el Zaragoza ya había obtenido antes la autorización de la LFP y el visto bueno del Tenerife y de las televisiones, ya que el partido lo emiten las autonómicas (Aragón TV y la Televisión de Canarias). El Tenerife, que viaja mañana a Zaragoza, tenía previsto regresar el lunes al mediodía, pero lo hará el martes.

Al final se impuso la solución más sencilla, aunque no deja de tener perjuicios para algunos aficionados, que quizá no puedan ir el lunes en un horario tardío, puesto que el Zaragoza no podía abrir La Romareda el domingo sin un número suficiente de trabajadores y no había servicios mínimos al no ser un servicio público. La otra posibilidad era jugar a puerta cerrada en ese horario, pero eso aún era más dañino para los aficionados.

La huelga está convocada para los días 1 y 2 de noviembre y el principal caballo de batalla de la negociación está en los fijos discontinuos, los 166 empleados que se encargan de abrir La Romareda los días de partido. El Zaragoza, como en otras áreas, tiene decidido externalizar ese servicio a una empresa con la intención global de ahorrarse en torno al 30% de los gastos salariales que tiene. En el caso de esos fijos discontinuos, el comité asegura que ha propuesto al club reducir esos 166 empleados a un número de unos 130 a través de prejubilaciones y bajas incentivadas y que eso supondría el ahorro de entre un 20% y un 25%, oferta que, según los trabajadores, la SAD no ha estudiado

Desde el comité de empresa se aseguró ayer que no había habido contactos ni avances en la negociación y se calificó de "esperada" la solución de retrasar el partido al lunes. Si, como se prevé, en el SAMA no hay tampoco avances esta mañana los trabajadores aseguran que propondrán nuevas medidas de protesta ante un ERE que califican de innecesario y con unas causas inexistentes, además de asegurar que el club no está queriendo negociar en ningún momento. De la distancia de las posturas que hay en la actualidad habla también el comunicado que se hizo ayer, en el que se asegura que el consejo de administración del Zaragoza "juega a la desinformación ante la huelga de trabajadores". En el mismo se acusa a los consejeros de la entidad de trasladar a los medios información falsa sobre la organización de personal en otros clubs y se les hace responsables de que el partido no se celebre el domingo.